Estos días los funcionarios Españoles en la UE se muestran muy avergonzados, frente a sus colegas comunitarios. Todo por que empieza a destaparse parte de la podredumbre de los gobiernos de Zapatero. Esta es la situación en que se encuentra España después de la denuncia hecha por el colectivo de funcionarios españoles “Manos Limpias” contra el ex presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero; la ex vicepresidenta segunda y ministra de Economía, Elena Salgado, y el jefe de la Intervención General del Estado, José Alberto Pérez, por falsificar las cuentas del déficit ante Bruselas y por un delito de daños a la economía nacional y que ha sido respaldada por la oficina de estadística de la Comisión Europea (Eurostat), según manifestaron a LA GACETA fuentes próximas a la institución europea.
En otras palabras, “Eurostat apoya el escrito de Manos Limpias contra un fraude masivo realizado por los máximos responsables del anterior Gobierno socialista”, señalan.
Y es que según se desprende del escrito, “Bruselas ha constatado que el Ejecutivo de Zapatero no sólo no cumplió con sus compromisos con los socios europeos, sino que ocultó y falseó la realidad de las cuentas públicas”. Por este motivo, el Gobierno de Rajoy se ha encontrado un agujero extra en el déficit de más de 26.000 millones de euros. En este sentido, funcionarios europeos han señalado que “no es serio que un Gobierno haga trampas”.
En cualquier caso, la acusación considera que tanto Zapatero como Salgado han sido los “inductores necesarios y cooperadores” como perpetrar los presuntos delitos de falsedad en documento público y daños a la economía nacional. Para el primero de ellos el Código Penal fija penas de prisión, multa e inhabilitación por faltar a la verdad en la narración de los hechos o alterar la autenticidad de un documento. La próxima semana la denuncia presentada se convertirá en una querella contra los mismos acusados.
Ya iba siendo hora de que, alguien de entre las instituciones libres de nuestro país –fuera de partidos políticos y sindicatos del régimen- se atreviese a denunciar hechos como estos, tan graves. Ahora, solo queda que se lo cuenten a la población en la prensa vegetal o en el telediario. Con todo, esperemos que se haga justicia.