Sacar unos huesos de una tumba no parece una gran hazaña. Y sin embargo los progres nostálgicos de Pamplona (nazionalistas + comunistas + podemos) están tratando de venderlo así mientras preparan con ilusión su particular 20-N. Quieren anunciar el fin de los enterramientos de la cripta del Monumento de Navarra a sus Muertos en la Cruzada como si ello representara una gran victoria para las vitrinas del «antifascismo». Como si clausurar un cementerio que lleva 80 años sin acoger a nuevos muertos fuera una urgencia sanitaria. O como si cambiar la ubicación de unos pobres restos enemigos fuera un primer paso triunfal previo a la demolición del Monumento.
Todo el mundo sabe que los familiares son muy libres de hacer traslados óseos. Alguno diría que ya no son tan libres cuando se les presiona desde la administración para ello. Pero aunque vaciaran todas y cada una de esas tumbas, no cambiaría un ápice ni la historia ni el testimonio que supone la mera existencia de ese gran edificio en el centro de Pamplona.
Las «victorias» de los revanchistas consisten en hacer exposiciones sacrílegas o en mover huesos. La nuestra es que día tras día esas piedras de la plaza de la libertad sigan gritando que hace 80 años la gran mayoría de los navarros se alzó libremente, leal a su propio gobierno foral, en contra del gobierno laicista y totalitario «de Madrid». Eso es lo que quisieran cambiar. Y rabian porque no pueden.
3 respuestas
Yo creo sr.Garisoain que la lealtad de la mayoria de los navarros de aquel momento iba más allá de a su propio gobierno foral .
Hola. El sr. Ispan me ha metido en un pequeño lío. Pensando un poco aporto lo siguiente para salir de él. Los navarros de entonces, al menos la gran mayoría, consideraban su realidad a modo de dos círculos concéntricos.
El ejemplo es para explicar algo más complejo.
El círculo interior sería el más próximo a los navarros, esto es, la Diputación Foral de entonces, y el círculo exterior las necesidades y sociedad del resto de España.
Es aberrante afirmar el círculo exterior sin el interior o bien creer que éste último estaba diluido y por ello desaparecido. A su vez, el círculo interior impulsaría propiamente a los navarros hacia el exterior toda vez que, el círculo exterior y el interior eran en esencia casi coincidentes.
Se me ocurre un ejemplo algo más complicado pero por eso será malo.
No era esa mi intención Sr,Argonz. Comprendido su comentario. Mis respetos a todos aquellos navarros que demostraron en aquel entonces un inmenso amor a Navarra y a España, y fueron ejemplo de valentía y capaces de dar sus vidas por sus ideas sin pedir nada a cambio , cayendo en toda España. Hasta en Córdoba. e individualñmente hasta en Lopera. Por cierto cerca del pueblo los Blazquez hay un lugar que se llama Sierra de Navarra y La Navarreta y en la Edad Media en tiempos del rey Alfonso XI, se denominaba segun leí Las Navarras