ETA Y NAVARRA Poco a poco los medios de comunicación estamos hablando de las decisiones de un gobierno dedicado a hacernos comulgar a todos con ideas variables que van dirigidas a un fin, se trata de conseguir contentar a todos. Pero eso es imposible. Las decisiones últimas están relacionadas con la negociación con ETA. Siempre se ha dicho que la única negociación es sobre cómo ETA va a a dejar las armas. Pero todos los datos, incluso el optimismo de Zapatero sobre el final de ETA, hacen pensar que se está hablando con ETA, que hay unas decisiones tomadas, que hay una hoja de ruta. Ahora el Gobierno diciendo que dice lo mismo, nos habla de que el proceso va a ser largo. Las preguntas son claras: ¿está el gobierno hablando con ETA?, ¿cuál es el contenido de lo que hablan con ETA?, ¿está Navarra encima de la mesa?. Y que den respuestas sin matices ni dobles sentidos: Sí o no. Y al Gobierno de Navarra que diga ya qué medidas va a tomar si se confirma que Navarra está encima de la mesa, cosa que no parece inoportuna, sabiendo que el nacionalismo siempre ha tenido puesta su mirada en Navarra. Luego podremos preguntarnos si cabe el perdón del terrorista, si se puede perdonar a quien no pide ni quiere el perdón, y ver cómo. Hablar de vencedores y vencidos es una polémica estéril, las víctimas están muertas, nunca habrán vencido. Convencer a sus familiares de que se olviden es una utopía y construir un futuro sobre una injusticia nos va a traer el caos. A Zapatero esto le da igual, porque para cuando nos lleguen las consecuencias de sus decisiones desafortunadas, él ya no estará en el poder, y el que gobierne entonces se tendrá que “comer el marrón” de decisiones zapateriles injustas. P.T.