Recientemente hemos publicado una "matización" que nos han enviado los responsables de comunicación de nuestra querida Caja de Ahorros de Navarra. Y la hemos publicado de mil amores porque en ningún caso era nuestra intención perjudicar a tan benéfica institución social. De hecho nos hemos alegrado mucho al saber que la dirección de la Caja ve su situación mucho mejor de lo que parecían indicarnos otras fuentes.
Ahora bien, tanto la Caja como cualquier otra empresa, o el mismo Gobierno, o quien sea, tienen que reconocer que nos necesitan. Entendemos que para alguien -o algo- que pase lo que pase siempre tiene asegurado un bonito coro de aplausos a base de publicidad y sillones puede resultar un poquillo estresante saber que existe un único y audaz medio de comunicación que se atreva a ejercer la crítica.
Pues bien, que sepan además que nosotros no vamos a renunciar a contar las cosas por dos razones. Primero, por "poliética", por responsabilidad con nuestros lectores. Y después por puro hedonismo. Porque por nada del mundo queremos renunciar al inmenso placer de ayudar a mejorar a las grandes empresas de Navarra. Si no, ¿quién lo va a hacer?
Jerónimo Erro