Quizás mi trabajo de funcionario me permita conciliar más fácil mi horario con el de mis hijos pero, desde mi punto de vista, el colegio no debe ser una guardería continua hasta los 18 años de edad. Mi responsabilidad como padre me exige no considerar el colegio como tal guardería y no entiendo los colegios (o las apymas) que en cada uno de los periodos vacacionales organizan campamentos y actividades en el colegio con una duración superior incluso a la jornada lectiva ordinaria. ¿Para qué tenemos los hijos? ¿Para que nos los guarden otros? ¡Qué pena! Yo quiero que mis hijos puedan ir al conservatorio, por ejemplo, a partir de las 4 de la tarde y no a partir de las 7 como lo tuve que hacer yo hace años. Sería maravilloso que acabasen para las 6 y después… vida familiar.