En relación con las declaraciones del vicepresidente del Gobierno de Navarra y consejero de Economía y Hacienda, Álvaro Miranda, en las que dice que “se ha demostrado que fue un error subir los presupuestos”, el Partido Popular de Navarra quiere hacer constar las siguientes declaraciones.
1.- El PPN lleva año y medio advirtiendo de la insensatez que supone la huída hacia adelante emprendida por UPN y el PSN, aumentando el gasto público y el endeudamiento de los navarros. Como respuesta a nuestras críticas, sólo hemos recibido ofensas y descalificaciones personales (también por parte del Sr. Miranda) tanto en ámbitos públicos como privados.
2.- La realidad de los hechos confirman que teníamos razón. Lo que lamentamos es que el “error” al que alude el Sr. Miranda sea bastante más que eso: es una completa negligencia. Miranda se mostraba ufano y autosuficiente hace sólo cinco meses, cuando aprobó los actuales presupuestos asumiendo una subida del 2,5%. Lo hizo de manera absolutamente irresponsable y siendo perfectamente consciente de que la Hacienda foral estaba completamente desequilibrada, como se comprobó con los 150 millones de euros de déficit generados en 2009.
Miranda es responsable de mucho más que de un error. Es responsable de la peor situación de las cuentas navarras que se recuerda, y es responsable también de la frivolidad con la que se desempeña en el ejercicio de su cargo. Que ahora pretenda reconocer “errores” ayuda poco: hubiera sido mucho mejor no emprender el camino de superficialidad e insolvencia presupuestaria del que es responsable.
3.- La actual situación de descalabro financiero de Navarra y el reconocimiento de la insolvencia presupuestaria a la que alude Miranda es fruto de haber trasladado a Navarra las nefastas políticas económicas del Partido Socialista, que son las que UPN viene apoyando también en Madrid. UPN y PSOE han apoyado en comandita límites de gasto público insensato y subidas de impuestos. Navarra se merece otra cosa bien distinta: el Partido Popular seguirá defendiendo medidas razonables para el futuro de Navarra, aunque algunos quieran seguir descalificándonos por ello.