En relación con la noticia conocida respecto al regalo de diversos relojes de lujo a cargos políticos que han ejercido como consejeros de Caja Navarra, el Partido Popular de Navarra quiere hacer constar lo siguiente.
1. El regalo de esos relojes de lujo a cargos políticos constituye un verdadero escándalo, es una dádiva absolutamente injustificable y ha producido la lógica reprobación de la opinión pública navarra, que no acepta este tipo de dispendios y ostentaciones en unos momentos en los que se atraviesan serios problemas económicos.
2. Resultan todavía más escandalosas las palabras del Vicepresidente del Gobierno de Navarra y Consejero de Economía y Hacienda, Álvaro Miranda, que relativizan la ética que debe presidir el comportamiento de los cargos políticos. Es una vergüenza escucharle decir que no dio importancia al regalo de un reloj Rolex, y que ya ni siquiera lo tiene. Es intolerable que pretenda limpiar su actitud aduciendo haber realizado un supuesto donativo de caridad. Tanto Miranda como Sanz deben devolver los relojes sin tomarle más el pelo a la opinión pública, y en el caso del Vicepresidente, por sus desvergonzadas explicaciones, debería abandonar su puesto de inmediato, al demostrarse incapaz de entender el fundamento ético de los cargos públicos, y relativizar un asunto de una indudable importancia.
3. Yolanda Barcina, Roberto Jiménez y Carlos García deben explicar convenientemente a la opinión pública por qué tardaron tanto en devolver el regalo, cuándo y por qué tomaron la decisión, y si llegaron a usar el reloj con normalidad. De no hacerlo, estarán dando pábulo a las diversas interpretaciones que al respecto se están haciendo.
4. Caja Navarra, entidad que dice hacer de la transparencia una seña e identidad, e incluso tiene como eslógan «Te contamos lo que nadie te cuenta», debe informar de qué órgano competente tomó la decisión de los regalos, cuantos relojes se distribuyeron y qué precios corresponden a cada uno.
5. Volvemos a reiterar que los mismos políticos que teóricamente se despedían y por ello se les entregaba el regalo, en realidad se mantienen en la entidad en la llamada Junta de Fundadores. Reclamamos una vez más la total despolitización de Caja Navarra, y la disolución de la citada Junta, cuya única razón de ser es seguir proporcionando privilegios injustificables a sus componentes.