HAMBRE Y POLÍTICA El pasado 5 de Mayo pude leer una columna del señor V.M.Arbeloa en la que reflexionaba sobre el último informe del Banco Mundial (BM) sobre los Indicadores de Desarrollo Mundial 2007. Quiero mostrar mi más absoluto rechazo e indignación a todo lo que el escritor planteaba en su artículo por varias razones: 1. El análisis que hace de los datos consultados es excesivamente positivo, cuando el mismo BM en el informe reconoce que “no se están cumpliendo los compromisos adquiridos”. 2. Permítame un comentario al lenguaje utilizado, usted que ha publicado libros sobre el tema. Cuando habla de pobreza extrema, deja ver que la pobreza a secas entra dentro de lo normal, sólo es analizable lo extremo, los peores casos. Para decir algo negativo del informe habla de África, y pone delante un “por desgracia”, insistiendo en la idea errónea y falsa que los problemas de los hermanos africanos son una desgracia y no una injusticia. 3. Todo su planteamiento se basa en las cifras, en unas cifras elaboradas por un organismo que lejos de pretender acabar con el hambre y la pobreza en el mundo, se dedica a todo lo contrario, a allanar el camino de las grandes transnacionales para que el robo a los empobrecidos-que no pobres- sea aún mayor. El hambre, las guerras, la sed, la miseria,…que padecen más del 82% de la humanidad son el producto de las políticas que el mundo opulento instrumentaliza para mantener sus estándares de vida y consumo. Cada día mueren por hambre 100.000 personas, y la mitad de ellos son niños, existen más de 400 millones de niños esclavos, miles de personas sin acceso al agua potable, a la educación,…NO podemos tolerar ni permitir análisis ni informes que no vayan a la raíz y causa del problema, porque hoy el hambre y la pobreza son evitables si hay voluntad política. En el mundo se producen alimentos para alimentar al doble de la población mundial, ¿por qué no se hace?. Como usted dice al final de su artículo, el hambre debiera ser el primer problema político que se planteen nuestros partidos en las próximas elecciones, ¿alguno lo pondrá en los primeros puntos de su programa?. Le animó que para hablar de los problemas de los empobrecidos consulte páginas como www.solidaridad.net, donde yo he encontrado la siguiente afirmación de Jean Ziegler relator de la ONU para la alimentación: “es necesario un compromiso político para hacer frente a las políticas existentes, a las desigualdades y a la corrupción en todo el mundo que están haciendo que los ricos sean cada vez más ricos y los pobres cada vez más pobres. Necesitamos soluciones políticas más que complicadas soluciones técnicas para el hambre”. Samuel Valderrey