La caída en picado de la calidad de las personas que rodean a Zapatero es manifiesta. El caso más evidente seguramente es el de la Sanidad. Zapatero empezó contando con gente como Bernat Soria y acaba dejando el ministerio en manos de Leire Pajín. Nos podemos ir preparando si nos ponemos enfermos. Menos mal que en Navarra gobierna la derechona y estamos al margen y con los niveles de satisfacción con la sanidad más elevados de España. Vale que siempre se puede mejorar, pero con este dato no nos puede dar lecciones alguno que otro. La culpa de todo este desastre, no obstante, la tenemos los españoles. Fuimos los españoles quienes elegimos como presidente a un señor que no sabía nada de economía pero que iba a aprender lo necesario en dos tardes. Y encima lo reelegimos. Quien ahora hace huelgas generales contra él tiene lo que se merece, porque lo que tiene es el resultado de lo que ha estado apoyando durante años. A ver si la próxima vez pensamos un poco lo que votamos.