Yo, D.José Ignacio Moros Bailón, DNI xxxxxxxxxxxx (editado por NC), con domicilio en C/ San Pedro Nº 9 1º dcha, ante las declaraciones de la Sra. Presidenta, quiero aclarar:
1º Que desde el primer día en que esta señora se hizo cargo de la Mancomunidad, la persecución y el acoso hacia mi persona por parte de la dirección de Mairaga ha sido bestial y, la consecuencia, graves problemas de salud (tratamiento psiquiátrico y una incapacidad en el tobillo para toda la vida) Todo esto ha sido denunciado mediante escritos, sin que usted haya hecho nada para remediarlo. (Pongo los informes médicos y los escritos a disposición de quien los quiera ver)
2ª Que jamás ha salido de mi boca que yo propusiera en una reunión del comité de empresa la recolocación en Aqualia. ¿Cuándo se hizo, y por qué la famosa acta del comité no esta firmada por mí, si tanto me interesaba? Le respondo. Esa acta se hizo cinco meses después para presentarla de prueba para el juicio de Mari Ciriza por despido improcedente, prueba que fue desestimada por el juez (por algo sería.)
A mí, concretamente, usted me propuso pasar cedido como trabajador de Mairaga o integrarme en Aqualia, renunciando a Mairaga. Tuvimos una reunión con la dirección de Aqualia en la que nos comentaron que era imposible pertenecer a Mairaga y pasar cedidos a Aqualia (gran mentira la propuesta de la Presidenta) y a continuación les dimos las gracias y les comentamos que lo íbamos a pensar. (He comentado en plural porque éramos dos trabajadores implicados.)
A partir de esa reunión nos informamos con trabajadores de Aqualia de las labores que íbamos a desarrollar. Nos llevamos una gran sorpresa cuando nos dijeron que nos iban a tener barriendo la nave hasta que llegara el camión que nosotros íbamos a utilizar. Fue a partir de entonces cuando decidí presentar la reclamación de fijeza laboral, debido a que ya había tenido el accidente del tobillo y me habían detectado unos pequeños quistes en el tiroides (¿cuánto iba a durar en Aqualia con esos antecedentes de salud?) Y, aparte, llevaba más de cuatro años con contratos irregulares, juicio que gané, siendo declarado indefinido laboral hasta que se amortice o se cubra la plaza. Mi compañero Mari empezó una negociación con Mairaga para garantizar que no sería despedido una vez integrado en Aqualia y en plena negociación fue despedido, puso una demanda en el juzgado por despido, demanda que ganó siendo declarado despido improcedente.
Que fácil es pagar sus fallos con dinero de todos, por su mala gestión.
3º Que desde la Dirección de Mairaga se creó una plaza de peón, única manera de poder echarme, ya que se encargaron de que yo no pudiera presentarme para optar a ella debido a mis problemas físicos. En las bases, por primera vez en la historia de Mairaga, se solicitaban pruebas físicas. Conclusión. Yo no me presento y de los que se presentan no aprueba nadie y se declara la plaza desierta. ¿Tenía alguien duda de que era un montaje? Yo no sé qué pruebas pusieron, pero seguro que si hubiesen puesto sumas, divisiones y multiplicaciones, como para las pruebas internas de chofer, más de uno las hubiera aprobado. Da la casualidad que sus amigos de LAB y UGT, aprobaron la oposición y el único trabajador que no era de estos sindicatos la suspendió.
4º No me puedo explicar, si mi puesto sobraba, ¿por qué desde que yo caí de baja se me buscó un sustituto, que esta trabajando actualmente? por cierto a esta persona usted mediante RESOLUCIÓN Nº 1BIS DE 10 DE ENERO DE 2011 de presidencia, lo contrata hasta provisión de plaza, ósea lo hace indefinido, cosa que yo tuve que luchar en los juzgados para conseguirlo.
Yo podía desarrollar ese trabajo, puesto que mi incapacidad era para el puesto de peón. No olvidemos que fue en accidente de trabajo y el deber de la dirección era reubicarme en otro puesto a lo que se negaron.
5º Por último, quiero agradecer a Mancomunidad de Mairaga los años en que he podido desarrollar mi trabajo, con excepción de estos últimos presididos por Dña. Maite Mañu y su dirección, que han sido un calvario para mí. Una entidad como Mairaga no se merece esta gestión tan nefasta. Sólo espero que los próximos gestores sepan hacerlo mejor, por el bien de los contribuyentes y por el bien de algunos trabajadores que quedan, que están esperando que esta situación se arregle y se acaben de una vez los amiguismos y las situaciones extremas que tienen que soportar.
Se me olvidaba, Sña. Presidenta. A la comida a la que según usted fue toda la plantilla, solo acudieron siete trabajadores de los veintitantos que están actualmente.
Un saludo