Otro nuevo festejo del "Dia Internacional de la Mujer" nos llega esta vez en plena crisis, llenitos de recortes y con pocas ganas, en la calle y en los políticos, de pensar en esas mujeres que este año trabajarán todas como cada día porque son desiguales. Aunque se llenan muchas bocas hablando de la igualdad, siguen siendo muchas las mujeres que se empeñan en ser distintas, las mujeres que trabajan en y desde sus hogares en jornadas completas, sin sueldo, sin pensiones, sin apenas derechos ni reconocimientos. Esa es la situación de millones de mujeres que ven como son ignoradas en las políticas familiares porque trabajan en sus casas cuidando de hijos, padres, enfermos y discapacitados en épocas de bonanza o de crisis, 365 días al año, en jornada completa y exclusiva y para ellas no cambia nada, siguen siendo ninguneadas, invisibles, y por tanto no valoradas y desprotegidas. Cuando hablemos de mujeres pensemos sobre todo en ellas, al menos un día como éste recordemos que siguen en la brecha y que la solidaridad y la justicia también debe llegarles con urgencia.