Así lo cuenta El Confidencial, que señala que Rodríguez Zapatero ha preferido continuar con su misión redentora, y desoyendo los consejos de personas destacadas del partido, ha dicho a Puras que puede empezar a negociar. Nos obstante, parece que ha puesto dos condiciones, “apartar de las negociaciones el Ayuntamiento de Pamplona, donde desbancar a UPN obligaría a contar con los dos votos de ANV, algo que desde el PSOE se considera inadmisible. En segundo lugar, que en un hipotético acuerdo de gobierno con la coalición se soslayen totalmente las cuestiones nacionalistas y se centren única y exclusivamente en temas de política foral”. El periódico relata que Manuel Chaves y otros hombres fuertes del PSOE le recomendaron no pactar con los nacionalistas por las consecuencias negativas que el hecho podría tener para las elecciones generales. Consideran que la cuestión de ETA les ha perjudicado ya en las municipales y podría empeorar las cosas en los próximos comicios. Pero Rodríguez ha preferido seguir su instinto político y continuar con su ‘proceso’. De hecho, se da por sentado que la rueda de prensa de Uxue Barkos en el Congreso, en la que rechazó contactos con ANV mientras no condenen la violencia, se enmarca en el acuerdo inicial para comenzar las conversaciones. De todos modos, todavía en sectores de poder socialista se baraja dejar que Sanz gobierne en minoría hasta 2008, en se plantearía una moción de censura. Todo son elucubraciones que se irán confirmando o descartando a partir de la semana que viene.