Para autoubicarse ideológicamente se supone que ya está uno mismo. No obstante, se supone que hay una serie de ideas que objetivamente nos sitúan en un punto u otro del espectro ideológico. El caso es que hay algunos test que nos pueden ayudar a complicarnos un poco la vida. Naturalmente el creador del test puede orientar las preguntas para predeterminar las respuestas y situarnos casi donde quiera.
Si usted hace el test y no aparece ubicado donde cree que debería estar, o es eso o que a lo mejor realmente es usted un facha rematado sin saberlo, por ejemplo. Si fuera el caso, a lo mejor este test puede ayudarle a comprender cómo era posible que un día estuviera cantando La Internacional y al día siguiente cenando en El Bulli, o a rellenar esas extrañas lagunas de su memoria en las noches de luna llena.
6 respuestas
Lo hice hace años. Creo que cada vez soy más liberal, sobre todo cuando me enfrento a la idiocia de los argumentos pseudoprogres y recetas decimonónicas y octubristas de la izquierda. Marx no dio ni una. Lenin un gran asesino , hasta el de las camisetas, el Che. Y ahí siguen dando matraca.
En resumen, soy liberal, pero si voy a la web del Partido de la Libertad Individual, resulta que son abortistas confesos. Y van y dicen que están a favor de la libertad cuando no afecte a la de otra persona ¡y al nasciturus, que le den! ¡Qué vergüenza! No tendré más remedio que seguir votando a UPN, los «más antiabortistas» dentro de los partidos con representación en Cortes, y que de liberales tienen más bien poco…
Bonito test, me ha dicho lo que ya sabía y ha confirmado mi postura, liberal, de derechas.
Creo que mas de uno debería hacerlo, y así se daría cuenta de que la política que predican está muy lejos de sus pensamientos. Pensamientos que predican con el ejemplo y sus actitudes, que para nada se corresponden con la persona.
Y así nos va con nuestros políticos, predican la cultura del oportunismo profesional, basada en los intereses partidistas y personales que dejan fuera toda representación social y ciudadana que en estos momentos necesitamos.
Lo que me resulta de una cierta repugnancia intelectual son las personas que se las dan de progres y de izquierdas en público, de cara a la galería, pero se puede observar cómo en su ámbito privado le gusta ser más «pijos» que los «pijos» de derechas, y les gusta el lujo que se consigue gracias al dinero, como a todo hijo de vecino. Es la contradicción en estado puro, ese conflicto interno entre el buenismo para con los demás, que no merecen algo mejor, y lo que yo merezco a raíz de mi talento. Para los demás los público y lo social, pero para mí lo privado y caro. Amén.
Pues a mi me sale liberal de izquierdas…
Que gracia, aquí todo el mundo es liberal.
Como Esperanza Aguirre.
Bueno, no tanto, ella lleva 30 años trabajando para el Estado, está claro que conoce muy bien toodo lo que hay que regalar… digo liberalizar.
Pués oigan, yo he salido rojo, pero rojo rojo. ¿ Lo habré hecho bién?.