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En las últimas fechas venimos hablando de la deuda de Osasuna con Hacienda (es decir, de la deuda de Osasuna con todos los navarros), de su cuantía, de la supervivencia del club, de la forma en que podría pagarla…
Llamativamente, se habla mucho menos de quiénes son los responsables de que se haya generado esta situación y en qué manera debieran responder de ella.
Paradójicamente, a algunos de estos posibles responsables les encanta reunirse para hablar y aparecer en los medios para que trascienda su preocupación por otros asuntos, con lo interesante que sería que aparecieran en los medios para explicarse sobre este tema.
Hace apenas 24 horas, al presentar su plan para pagar la deuda del club, el presidente de la Junta Gestora de Osasuna, Javier Zabaleta, afirmaba que la entidad no descarta pedir responsabilidades a las anteriores directivas de la entidad por la gestión que realizaron en los últimos años, y que han ocasionado una deuda de 65 millones: “Si podemos demostrar que hay responsabilidades, las exigiremos”.
En el mes de abril en entonces presidente de Osasuna, Miguel Archanco, reconocía públicamente que Osasuna se había estado sobrefinanciando gracias a que no pagaba impuestos como el IVA o el IRPF.
En 2013 Angel Vizcay, gerente del club, declaraba en la Asamblea de Osasuna que el club se preocupaba de fichar jugadores en vez de pagar a Hacienda porque la propia Hacienda promovía esta clase de comportamiento:
“Si se pagaba eso en hacienda no se podían hacer otros pagos, como fichar jugadores etc. Es decir, jugadores que han venido aquí con fichas altas no hubiesen venido en ese momento porque hubiese habido que pagar a Hacienda. Y con hacienda siempre se estaba en contacto y a base de patrocinios o demás la propia hacienda siempre nos decía que no nos preocupásemos, que siempre se llegaría a algún acuerdo. Por tanto se daba prioridad al pago de las fichas, al pago de las nóminas, de los bancos y de los proveedores antes que a Hacienda”.
Un interesante artículo de Diario de Navarra en junio recordaba cómo Patxi Izco llegó a la presidencia de Osasuna en 2002 con una situación delicada, debiendo 20 millones de euros de los que 4,2 se le deberían a Hacienda, al menos según la versión del propio Izco. Ya entonces se aprobó un rescate de Osasuna en el que el Gobierno de Navarra avaló un crédito de 18 millones a devolver en 17 años. Diario de Navarra sugería que las “buenas relaciones” de Izco con UPN y Miguel Sanz “determinan en buena medida el desarrollo de los acontecimientos”. Y esos acontecimientos fueron que, tan temprano como desde el año 2004, prácticamente al día siguiente del rescate del gobierno, Osasuna empieza a dejar de pagar de nuevo los impuestos. En el balance de 2004, reseña el Diario, se reconoce que Osasuna no pagó a 30 de junio 2,7 millones en impuestos. Después la deuda con Hacienda desaparece de los balances, pero aunque en 2008 se supone que la deuda fiscal atrasada es cero, “la realidad es que para entonces Osasuna ya debía más de 11 millones al fisco”.
El artículo también señalaba que a partir de 2007 Osasuna debería haber pagado anualmente de 12 a 14 millones de euros a Hacienda, de los que sólo abonaba unos 2 y que de 2009 en adelante no sólo es que la deuda es enorme sino que “el club está fuera de control con salarios netos de jugadores que rebasan el millón de euros”.
De todo lo anterior parece lógico preguntarse si la gigantesca montaña de deuda que Osasuna ha acumulado con Hacienda se debe a que había una serie de personas en Osasuna que decidieron dejar de pagar impuestos, o si se debe a que había una serie de personas en el Gobierno de Navarra que decidieron dejar de cobrárselos.
En este momento a lo mejor estamos ocupados pensando en qué salida se le puede dar a Osasuna: si aceptar como un mal menor el plan que el propio club presenta, si liquidar el club, o si convertirlo en sociedad anónima y que los interesados aporten el dinero que falta convirtiéndose en accionistas. Pero a l mejor algún día deberíamos dedicar algún tiempo a pensar en las responsabilidades de quienes han estado al mando del club y del gobierno cuando se ha generado esta situación.
Porque si en este país nunca nadie es responsable de nada de lo que pasa, seguramente esa es la explicación de que en este país sucedan todas las cosas que pasan.
6 respuestas
Joer…que lo pague Izco. Y sobre todo que lo pague Migueltxo Santz, así ya no le quedará tana pasta como tiene, para ir orgnizando saraos mafiosos en el Muga de Beloso, aquelarre siciliano entre piquilos y cogollos. Y ente col y col, «lechugas», pero como las de antes, de billete grande, los de 500euros.
En algún punto de la actuación del GN tiene que estar cerca la prevaricación o alguna irregularidad. No creo que haya sido el bedel quien ha ordenado no cobrar 8000 millones de pesetas. Y creo que los funcionarios son lo bastante inteligentes para guardar esas ordenes por escrito.
Lo dicho ayer: Maripaz va para los cuarenta y pierde ganas. Regalémosle una Nespresso y abundantes capsulas negras, que la tenemos dormida.
En cuanto a Izco y Archanco, me parece una injusticia equiparar a quien estuvo años y años al frente del barco y lo hizo encallar con quien se hizo cargo por una fracción de tiempo y con la entidad quebrada desde el principio. Me parece muy parecido , a escala, a Sanz y Barcina al frente del GN
«me parece muy parecido»
Lo copiare 100 veces…
Osasuna ha sido un negocio para unos cuantos. Esta afirmación no la perdamos de vista. Es clave. No es una ONG que por el bien común se sacrificaban unos pocos y una razón superior motivaba que Hacienda priorizara su actividad dejando al margen la OBLIGACIÓN de recaudar. No. Era un negocio de millones de euros. Miles de millones de pesetas. Para unos pocos.
El destacado en azul pone los pelo de punta. Las palabras de Vizcay son motivo más que sobrado para que el Fiscal General de Navarra actúe de oficio. Y no digamos la Cámara de Comptos.
También podía montar ‘la oposición del almacén’ otra comisión de investigación. Como aquella que hicieron el más absoluto de los ridículos. Sí, aquella en que Barcina les dio un repasito. Aquella en que una persona de confianza del consejero de Economía y HACIENDA anterior… fíjense:HACIENDA tiró de la manta, pero se equivocó de esquina.
En fin. Que ya basta. Osasuna: a pagar su deuda. Que no puede, a liquidar sus bienes. (El plan de viabilidad no supera un examen de Primaria: las sumas son fantasías animadas de ayer y hoy).
Osasuna NO ES un bien común. NO es una necesidad social. ES un club privado que ha dejado de pagar miles de millones de pesetas. Que intentó pegar un pelotazo urbanístico pero les explotó el polvorón cuando decían Pamplona.
Osasuna NO ES UNA NECESIDAD SOCIAL. Ya está bien.
El club atlético Osasuna tiene sesenta millones de euros de deuda; tiene unos catorce mil socios…ergo cada socio suscribe capital por unos cuatro mil euros y aquí paz y después gloria. También se puede decir que el quiera peces que se moje el culo, o sea, el que quiera furgol que se lo pague de su bolsillo!
En este momento me dispongo a completar una ayuda del Gobierno para mi pyme.
Voy a necesitar en torno a dos jornadas de trabajo, 16 horas. Me parece bien, nada es gratis y yo soy la interesada. Y el dinero público es sagrado porque es de todos, así que si me lo van a dar, debo merecerlo.
Lo primero: voy a tener que adjuntar el documento por el que el Ministerio me hace merecedora de ser sujeto de esta ayuda, tras haber sido sometida a una consultoría.
Voy a tener que presentar una memoria de la actividad (internacionalización de servicios).
Voy a tener que presentar un análisis del modelo de negocio firmado por un asesor del ICEX.
Cada justificación y cada certificado de gastos que son objeto de subvención deben ir acompañados por sus correspondientes facturas y sus correspondientes cargos en cuenta (con un tiempo transcurrido de 7 días), para las justificaciones de viajes. Las tarjetas de embarque, por ejemplo, deben ser las originales.
Además, realizaré una encuesta de satisfacción y ATENCIÓN:
– Adjuntaré un certificado de estar al corriente con Hacienda y con la SS.
Todo esto me parece bien. En mi caso estoy hablando de una subvención de unos 2.000 euros. Poca cosa. Lo sé. Pero para una pyme, poca cosa es mucha cosa.
Yo no soy una excepción, soy la regla. Así estamos todos.
¿De verdad puede defenderse que el Gobierno rescate a Osasuna? Es INMORAL.