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Transparencia Internacional es una organización no gubernamental dedicada a evaluar la transparencia de diversas instituciones públicas, incluyendo las cámaras de representación a nivel global. Para ello, en el caso de España, realiza un estudio anual en el que se evalúan seis áreas distintas: 1) información sobre el Parlamento. 2) relaciones con los ciudadanos y la sociedad, 3) transparencia económico financiera, 4) transparencia en la contratación de servicios, obras y suministros, 6) indicadores de la nueva Ley de Transparencia. El Indice de Transparencia de los Parlamentos (IPAR) incluye a los 17 parlamentos autonómicos, el Congreso y el Senado.
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Como decíamos, el Parlamento de Navarra ha obtenido una mala calificación en el último informe, recién publicado, concretamente somos los terceros por la cola tras el de Aragón y Andalucía.
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Con UPN, el Parlamento foral era el segundo mejor
El problema se acentúa si cabe cuando comparamos este resultado con el anterior, con datos de 2014, todavía en la etapa de UPN y bajo la presidencia de Alberto Catalán.
1-La nota del Parlamento de Navarra ha bajado de 87,2 a 67,5 con Ainhoa Aznárez
2-La nota ha bajado significativamente en TODOS los parámetros evaluados.
3-La bajada más llamativa es la de transparencia en la contratación de servicios, obras y suministros, en la que hemos pasado de a 83,3 puntos sobre 100 a 34,6.
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Ojalá pudiéramos decir que pese a masticar chicle, tener tics autoritarios, hacer demagogia con las banderas, utilizar un lenguaje chabacano, hacer un uso partidista de la cámara o utilizar el chófer para sus vacaciones, al menos hemos conseguido un Parlamento mucho más transparente, accesible y cercano. Pues bien, no sólo tenemos que soportar todo lo anterior sino que nos hemos desplomado en cuanto a niveles de transparencia. Ahora ni transparencia, ni formas. Como por otra parte era de temer. ¿Quién dijo que la zafiedad solía ser un síntoma de eficacia? Hay que reivindicar siempre las formas porque perder las formas no significa que nada se vaya a hacer mejor, y encima nos quedamos sin formas y disfrazados de Spiderman.
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Precisamente la publicación del Indice IPAR coincide con una curiosa noticia sobre Ainhoa Aznárez que de algún modo abunda en todo lo anterior.
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El PPN ha pedido un informe jurídico después de conocer que Ainhoa Aznárez ha borrado del diario de sesiones unas palabras de Ana Beltrán, acusando al Gobierno de Navarra de tener «las manos manchadas de sangre» por ir de la mano de Bildu.
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Según Ana Beltrán, Bildu se dio por ofendido por ese comentario y le exigió que retirara las palabras, la presidenta Aznárez le preguntó si las quería retirar y Beltrán contestó que no. En consecuencia, Bildu pidió a Aznárez que borrara las palabras de Beltrán del diario de sesiones a lo que ésta, por lo denunciado por el PP, ha procedido. El PP ha pedido un informe preguntando si Aznárez puede hacer eso, si se ha hecho alguna vez y si se puede hacer sin el consentimiento y ni siquiera el conocimiento de Ana Beltrán.
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A expensas de lo que diga el informe jurídico, parece un poco extraño que haya unas actas o un diario de sesiones si luego se van a borrar las cosas que se dicen en las sesiones. ¿De qué sirve poder acceder a esas actas si se han borrado cosas de ellas? ¿Tiene sentido que alguien pueda encontrar en Youtube cosas que sin embargo no están el diario de sesiones? Si para ver lo que se dijo hay que acudir a otro sitio, ¿para queremos un diario de sesiones?
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Lo que en cambio no va a ser fácil encontrar en Youtube ni en el diario de sesiones es el momento en que los diputados de Batasuna, Adolfo Araiz entre ellos, condenaban los atentados de ETA, llamaban criminales a sus autores, se alegraban de su captura y reclamaban que recayera todo el peso de la ley sobre ellos. Todo eso en unos años que la Justicia ya ha determinado que ETA y Batasuna eran dos filos del mismo cuchillo, al punto que Batasuna fue “un hecho instrumental por parte de la organización terrorista ETA, que forma parte de ella y que es incompatible el ejercicio de la política con la invocación, defensa o justificación de la violencia como método válido para su ejercicio”.
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2 respuestas
La transparencia en la contratación de obras, servicios y suministros la transparencia baja de 83 a 34… Gracias, podemoides, por protegernos de UPN metiéndonos en la kuadra vasquita. No se explica a un nacionalista sin un imbécil de izquierdas arrodillado lamiéndole los genitales.
Pero qué listo es el Refranero Español, por refranero, y por español, lo que les fastidia a esta gente.
Dime de qué presumes y te diré de qué careces.
Los adalides de la transparencia, de acabar con el enchufismo, de feminismo, de democracia real…son los que esconden todo, meten a sus compis y colegas pagando favores, abusan de mujeres en sus círculos cuando no meten a su nueva chorba de número dos, y se pasan la democracia por el arco del triunfo, que ya llegaron ellos y no hace falta votar más, con encuestas por internet ya les vale, y ellos mismo recuentan los votos.
No hay pilar de la democracia que no derriben.