La Ley Sinde marcó la gala de los Goya estableciendo una nítida división entre el encapsulado e hipersubvencionado mundo del cine y el resto del mundo. Los parias de la tierra desfilaron por la alfombra roja ostentando trajes y joyas de las firmas de lujo más progresistas. La ceremonia en sí nos costó a los contribuyentes españoles 1,2 millones de euros. Alguna de las actrices tuvo que soportar por ello alguno de los eslóganes más populares de la tarde, como «esas tetas las he pagado yo», entre muchos otros como los mencionados anteriormente y “libertad en la red” o “esto es un atraco”.
En el interior del recinto, sólo Alex de la Iglesia, el dimitido presidente de la Academia de Cine, conectó mínimamente con el exterior de la burbuja subrayando lo obvio durante su discurso de despedida: “sin público esto no tiene sentido”. ¿O sí que lo tiene?
Las escandalosas cifras del cine español
El año pasado el gobierno socialista subvencionó al cine español con 89,3 millones de euros. Frente a esta cantidad, los cineastas españoles sólo recaudaron en taquilla 69,7 millones de euros. A fin de cuentas, puede que el cine español sí que tenga sentido sin público. Sólo entre Avatar y Toy Story 3, por el contrario, las producciones americanas recaudaron 76 millones de euros. Todo ello sin necesidad de subvenciones ni de salir del cine deseando quemar una iglesia o meter en la cárcel al vecino.
El canon digital
Adicionalmente, la SGAE recaudó en 2009 la cifra de 90 millones de euros en concepto de canon digital. Es decir, el impuesto revolucionario que se aplica como presunto culpable de piratería al comprador de cualquier disco duro, reproductor mp3 o DVD virgen. ¿A quién le importa el público ni la calidad de sus productos cuando el dinero de los impuestos garantiza su chiringuito?
5 respuestas
o como decí el clásico: SUBVENCIÓN CERO AL CINE DE ZAPATERO!
Apoyo lo de subvención cero y más cuando veo el despilfarro de la gala, en la que un grupo de «progres» se reúnen para aplaudir sus propias películas, que cada vez son menos vistas e interesan menos.
Chupópteros trasnochados disfrazados de nuevos ricos. Y el caso es que envuelven en sus garras a jóvenes talentos que podrían brillar si no los metiesen en la rueda de poner la mano SI o SI: TIRANÍA. Imprescindible, como no, la asistencia de Leyre Pajín al evento ¿que pinta? ¿pagó su entrada?
¿Qué pinta Pajín? Pues está claro, como ministra de sanidad fue a dale la pastilla a Alex de la Iglesia, para ver si se le pasaba el calentón con la ley SINDE.
Esta casta de políticos que nos ha tocado vivir son todos unos impresentables…
Hoy mismo he leido en Diario de Navarra las declaraciones del director de la «cosa» que ganó el Goya a la mejor película afirmando, sin ruborizarse que SIN SUBVENCIONES NI SE PUEDE HACER CINE NI SE PUEDE HACER NADA EN ECONOMÍA. Pero en qué mundo vive esta gente. ¿Han sido abducidos o vienen de algún ignoto planeta (Chupopteralia, Cazopea)? Chuk Norris, si existes ven pronto.