Nos gustaría decir que exageramos, pero no estamos nada seguros de hacerlo en este caso. Sin duda hay dos bandos. Los combatientes y las víctimas pertenecen a países de todo el mundo. Hay muerte y destrucción. Y habrá más en el futuro. Sin duda no ha comenzado hoy. Tal vez lo hizo el 11S. O el 11M. O quién sabe exactamente cuándo. Los frentes no están definidos. El campo de batalla puede ser una estación de metro, un rascacielos, la redacción de una revista. No es una guerra convencional pero ha comenzado y es la gran conflagración que se nos viene encima en el siglo XXI. Puede que a veces veamos pequeñas masacres de yihadistas solitarios. En otras ocasiones serán espectaculares. En el mejor de los casos será una guerra no convencional con armas convencionales. En el escenario más apocalíptico, los terroristas serán capaces de hacerse con el control de algún artefacto nuclear y detonarlo en una gran ciudad. Lo que es seguro es que lo sucedido en París no es el último capítulo de esta guerra, ni mucho menos. Ojalá estemos exagerando.
El enemigo está dentro
Otra de las características de esta guerra sin frentes es que el enemigo no está al otro lado de una muralla o una trinchera, sino que en gran medida lo tenemos dentro, entre nosotros. Pero eso no lo hace menos enemigo sino sobre todo un enemigo más peligroso. Un enemigo que se caracteriza por su islamismo fanático, pero que resulta difícil identificar entre varias decenas de millones de musulmanes europeos. Hay que luchar con un bisturí contra mochilas bomba, aviones suicida y fusiles automáticos, lo que en principio coloca a la civilización en desventaja.
Willy Toledo
Willy Toledo, diciendo que Occidente asesina diariamente, es el equivalente a alguien que justificara cualquier atrocidad indiscriminada contra los musulmanes. No se ha atacado a Occidente, que también, sino a la libertad de expresión y la civilización. Es en la sede de una revista satírica y no en la sede de la OTAN donde los islamistas han atentado. Una revista satírica que Toledo no se ha molestado en saber cuál era su postura respecto a la Guerra de Iraq u otras intervenciones. O contra los católicos, ya puestos. Por lo demás, gente puede morir en países musulmanes tanto por acción, como en Iraq o Libia, como por omisión de Occidente, al igual que en Siria. Así que hagamos lo que hagamos o no hagamos siempre habrá alguien que podría sentirse justificado para cometer un asesinato en Occidente. Y siempre habrá algún poderoso intelecto como el de Willy Toledo capaz de volver la culpa contra la víctima o justificarlo. Aunque si alguien mañana pone una bomba a Maduro o a Castro es probable que no vuelve la culpa contra ninguno de ellos. Que para eso están los cerebros unidireccionales y los embudos.
No es la religión, es el fanatismo
Las imágenes de los islamistas rematando en el suelo a un gendarme son en realidad indistinguibles de las que podrían haberse filmado de un etarra rematando a un guardia civil o un policía nacional. Resulta por ello curioso que algunos nacionalistas hayan reflexionado sobre la maldad intrínseca de la religión con ocasión de este atentado, cuando nunca pensaron en la maldad intrínseca del nacionalismo si los encapuchados eran otros. Sucede también que en nombre de la religión lo mismo una persona se va a cuidar leprosos que pone un coche bomba en una pizzería. Todo es religión, pero no todo es lo mismo.
Vale. No eran maravillosos
Seamos sinceros. Si hace una semana hubiéramos tenido que opinar sobre las caricaturas de la revista Charlie Hebdo, una publicación similar a El Jueves, seguramente nos hubieran faltado adjetivos para calificar a los autores de algunas de ellas. No sólo por la diferencia de pensamiento sino, sobre todo, por la forma irreverente e insultante de dirigirse a quienes no piensan como ellos, particularmente los católicos. Si no nos parecían maravillosos hace una semana, sería una hipocresía decir ahora que quienes trabajaban en Charlie Hebdo eran maravillosos, y por tanto no lo diremos. Pero lejos de reducir esto nuestra condena al atentado la refuerza. Rechazamos el horrible atentado incluso desde la enorme distancia ideológica que nos separa de las víctimas.
Negacionismo
Primero quizá fue el 11S. Luego el 11M. Pero también estuvo lo de Londres. Y lo de Boston. En Siria o Iraq se está llevando a cabo un auténtico genocidio silencioso contra los cristianos. Eso también forma parte de esta Tercera Guerra Mundial que se libra en las calles de París, pero también en las de Kabul o Qaraqosh. Las decapitaciones a manos de islamistas las hemos asumido ya como una sección más del Telediario, entre los deportes y el tiempo. Durante estas Navidades, en Francia, antes del atentado de ayer, ha habido tres atentados islamistas más de yihadistas solitarios. Llama la atención que en la propia Francia se ha evitado en lo posible llamarlos atentados islamistas o ponerlos todos en relación. Ni pensar en una Guerra Mundial en la que no queremos estar. Cerremos los ojos y pensemos en algo bonito esperando que esto no vaya a ir a más.
«Sumisión»
La masacre de París viene precedida por la publicación de una nueva novela de Michel Houellebecq que ha levantado una gran polvareda en Francia justo antes del atentado. Ayer resultaban inevitables en los medios las numerosas referencias a Houellebecq. El título de la novela, significativamente, es «Sumisión», que como todo el mundo sabe es lo que significa literalmente «Islam». La novela describe el hipotético ascenso al poder en Francia de un partido islamista, un Podemos musulmán que en unas elecciones a dos vueltas se disputaría la presidencia con Marine Lepen quedando relegados los partidos de la «casta», el Partido Socialista o la UMP. Houellebecq, limítrofemente ateo, considera algo así como que la batalla del laicismo contra el Islam está perdida. Que el vacío no puede detener una locomotora. Que el freno contra el laicismo sería en todo caso el catolicismo. El siguiente vídeo, que seguramente muchos de ustedes conocerán, no se ha filmado en las calles de Riad sino en las de París. Cerremos los ojos, pero si los yihadistas son los peces a lo mejor la pecera es esto.
https://www.youtube.com/watch?v=32vEgXPZKiM
Pegida y Lepen
Tampoco resulta fácil eludir el relacionar la noticia de ayer con otras que tenían lugar muy poco antes o muy poco después. En los diarios de ayer mismo aún resonaban los ecos de la manifestación en Berlín de Pegida, acrónimo de Patriotas Europeos contra la Islamización de Occidente (Patriotische Europäer gegen die Islamisierung des Abendlandes), que cada vez moviliza a más alemanes. Políticamente, hoy se da a Marine Lepen como la gran beneficiada de los atentados. Es difícil negar por completo algún tipo de relación entre inmigración masiva islámica y terrorismo islámico. Descubrir la identidad de los terroristas asusta aún más porque nada impide que sean jóvenes nacidos en Francia, educados en colegios públicos laicos y republicanos, a los que han repartido condones en clase y que al final han acabado convertidos en asesinos fanáticos de la Yihad.
Sin papeles y sin vallas
Hasta el más progre de los progres tiene una puerta en la entrada de su casa, que cierra cuidadosamente cada vez que entra o sale. Si alguien entra invitado le llama amigo. Si entra por la fuerza le llama intruso, allanador o ladrón. Pero por alguna extraña razón, cuando no se trata de su casa sino del país, el progre a menudo aplica una teoría totalmente distinta que la que practica y desea para su casa. La inmigración no es intrínsecamente buena ni mala. Un país no puede acoger infinitos inmigrantes. Tiene derecho a cerrar la puerta o a elegir cuántos o quiénes pasan y quiénes no pasan. Como en una casa. Y entonces no tiene excusa para no tratar bien a los que recibe. Pero a lo mejor decide que eligiendo y prefiriendo a unos inmigrantes frente a otros bajan las posibilidades de que ametrallen una redacción o vuelen un vagón del tren. Y si eligiendo quién entra y quién no bajan las posibilidades de que vuele un tren, la pregunta quizá sea qué sentido tendría no hacerlo.
Negociación
Hay una forma alternativa de evitar futuros atentados y este desagradable enfrentamiento. Es la rendición y la sumisión. O como nos gusta decir en España: la negociación. Bien es cierto que, en el amor por la negociación en nuestro país, suele haber una relación directamente proporcional entre las ideas que quiere imponer el terrorista y las del partidario de la negociación. A más proximidad ideológica con el terrorista, más amor por la negociación. Por ello personas que sostienen que la falta de negociación con ETA ha sido la causa fundamental de su violencia, por ejemplo, en ningún momento dirían que Franco fue el resultado de no haber sabido negociar con el bando nacional. En una interesante entrevista al citado Michel Houellebecq, El País describe de este modo el suave yugo islamista partiendo de la novela: «Al día siguiente, las mujeres abandonan la vestimenta occidental. La mayoría empieza por llevar largas túnicas de algodón sobre los pantalones; animadas por las subvenciones del gobierno, dejan sus empleos en tropel. El desempleo masculino cae en picado de la noche a la mañana. En barrios que antes eran peligrosos el crimen prácticamente desaparece. Las universidades se vuelven islámicas. Los profesores no musulmanes son forzados a acogerse a la jubilación anticipada a no ser que se conviertan y se sometan al nuevo régimen». El propio Houellebecq sostiene que tampoco le parece tan terrible, excepto para las feministas. Alá aprieta, pero no ahoga.
Natalidad
Un enfoque alternativo para la Tercera Guerra Mundial es el de la natalidad. Puede que esta «guerra» a fin de cuentas no la ganen los tanques, sino los partos. Los musulmanes son actualmente una minoría, pero tienen muchos más hijos que la población autóctona. En algunos países de Europa, o en algunas ciudades de Francia, casi la mitad de los niños que nacen son musulmanes. Decir esto es políticamente incorrecto, pero primero está el hecho de si es cierto o no es cierto, ya discutiremos luego si las matemáticas con fascistas. El siguiente vídeo puede que sea, o no, exagerado, pero la propia web de la Junta Islámica de España parece abonar esta tesis al menos en alguna medida.
https://www.youtube.com/watch?v=K1F1-J7jaug#t=200
21 respuestas
La OAS un grano en el culo? Unos tipos que dieron un golpe de estado en Argelia? Que intentaron matar a De Gaulle? Que mataron 2000 personas? Que tenian literalmente cientos de miembros, muchos de ellos militares profesionales?
Que razón lleva Vd. sr.Liberal Navarro. Yo añadiría respecto a la posición oficial francesa de Monsieur Mitterrand la del presidente Giscard d `Estaing, incluso Jacques Chirac ,en tiempos de este último cuando no se compraban diversos bienes a los franceses( locomotora de AV) o no se seguía la política exterior francesa la cooperación policial al parecer sufría algún que otro altibajo. En la etapa de Sarkozy como ministro del Interior y luego Presidente comenzó la mayor cooperación con España, en la entrega de terroristas y lucha contra los mismos. Tal vez entre otras razones porque se corría el riesgo de que el terrorismo etarra se expandiera y erosionara la grandeur de la France , de todas formas no es posible evitar las buenas caras francesas con la izquierda separatista , siempre que no haya exportación de violencia a allende el Pirineo. No obstante hay que agradecer al sr. Sarkozy la ayuda que nos prestó, es lo que corresponde.
Habría que pensar si en determinados momentos no existió una especie de concierto no escrito ni explicito, si no del tipo “a buen entender sobran palabras “, cuyo artículo único sería que al sur de los Pirineos hagan vdes. lo que quieran, pero aquí nada que contra Francia. Claro está , salvo cobrar el dinero producto de extorsiones en los medios “ baskos”de San Juan de Luz o Biarritz , recuerden aquellas cartas reclamando a empresarios, industriales etc de Vascongadas y Navarra con tan sutiles amenazas de “ejecución” si no entregaban las cantidades que les demandaban. Construir zulos para armas y explosivos, entrenar grupo de terroristas, planificar asesinatos que ensangrentaron las tierras de España y residencia para el aparato dirigente.
Sin embargo, lamentar , condenar y estar de corazón con la Francia herida por los asesinatos de París , pues ese enemigo es también el nuestro y de todo Occidente . No me cabe duda que España cumplirá sin dobleces con su deber contra el terror.
Es curioso que en Occidente ahora la mayoría de la ciudadanía se eche las manos a la cabeza tras lo de Paris. Y digo curioso porque ha sido el propio Occidente quien alimentó y está alimentando a esta bestia llamada yihadismo. Hace muchos años que la Administración de EEUU creó, financió, armó y mimó a los talibanes en Afganistan. Para EEUU cualquier cosa era mejor que la Unión Soviética aunque en la época de la URSS en suelo afgano las mujeres podían ir sin velo y eran iguales a los hombres.
Pasaron los años, se invadió Irak y ya hemos visto el resultado: occidente ha dejado «echó unos zorros» el país. Luego les dio igual armar hasta los dientes a yihadistas libios para quitarse a Gadaffi (casualmente cuando este personaje se había vuelto pro-occidental) y llegó la primavera árabe y como Siria era enemigo de Israel y las monarquias feudales del Golfo (Qatar y Arabia Saudi), armó a la variada oposición siria para derribar al gobierno sirio (armas que han acabado en manos yihadistas). Petrodolares y armas para yihadistas de todo el mundo que fueron a Siria. Ojo, también yihadistas ceutíes y de otras partes de la península han ido a Siria, uno de los cuales, por ejemplo, se inmoló con un camión lleno de explosivos en un cuartel sirio. Yihadistas que están volviendo, siendo uno de los resultados lo de Paris.
Pero vayamos a lo importante. ¿Cómo se financia el Estado islámico que controla buena parte de Irak y Siria?. Primero fue con dinero de Arabia Saudi y Qatar, países que financian las madrasas donde se pregonea el wahhabismo que es la versión de la que se nutre el yihadismo y ahora también mediante el petróleo de los pozos de Irak y Libia que controlan los yihadistas que les compran petroleras occidentales y que sirve a los yihadistas para pagar buenos sueldos. Además, tenemos a Turquia que hace la vista gorda dejando pasar por su frontera a yihadistas de todo el mundo que están ahora en Siria e Irak. Turquia ve con buenos ojos que los yihadistas intenten masacrar al pueblo kurdo para no mancharse las manos de sangre.
En conclusión, los intereses geoestratégicos están llevando al esperpento de que armamento y dinero occidental estén yendo a manos yihadistas.
Hace unos años leí una obra titulada Memoria contra la religión de Jean Meslier.
Esta obra que había sido escrita hace más de doscientos años es de vigente validez en la actualidad y creo que merece ser leída y releída y de principio la aporto de prueba para ña propuesta que realizo en estos párrafos.
Yo he sido educado profundamente en la religión cristiana católica, al leer esta obra pude ver toda la historia sagrada que había estudiado de niño desde una perspectiva muy diferente a como lo había entendido entonces: Dios era un ser omnipresente y todopoderoso que para mayor orgullo de los creyentes, durante siglos guerreó contra quienes no creían en su poder. Por primera vez entendí el temor a dios en toda su extensión y lo que significaba para la sicología humana. Curiosamente ese dios es el mismo dios en quien creen judíos, cristianos y musulmanes y que se recreó en la novela sagrada que es común a todo ellos.
De lo que conozco de los años de la historia más reciente del mundo occidental a mi edad y desde mi atalaya cultural, he llegado a la conclusión de que la gran mayoría de las guerras de las que he tenido noticia han sido guerras de religión aunque fuera ocultas tras intereses patrióticos o de nobles linajes. Cristianos, judíos y musulmanes siempre envueltos en guerras sangrientas e inexplicables y construyendo luego la historia para mitificarla. Incluso en las guerras del siglo XX en su gestación y desarrollo, las distintas religiones han tenido protagonismo y trascendencia. Sirva de ejemplo que tras el golpe de Estado del 18 de julio de 1936, la guerra que continuó tras su fracaso tuvo un importante aliento, justificación y sostenimiento de la Iglesia Católica quien en definitiva fue la mayor beneficiada con la victoria. En definitiva y en el fondo todo lo que estamos viviendo en estos años de enfrentamiento de todo tipo por todos los rincones de la Tierra entre cristianos, musulmanes y judíos, no deja de ser algo más que una continuación de todas aquellas guerras.
Este odio secular entre religiones es la madre de todas las guerras.
En el actual entorno social y político en el que desde todos las opiniones correctas se pretende reconstruir el mundo desde un lado más humano y complaciente, entre todos estamos tratando de establecer normas para que las ideologías que se entienden violentas y alentadoras de la violencia sean ilegalizadas y perseguidas: el nacionalsocialismo, el racismo, la exaltación del odio… tratando por todos los medios que pierdan influencia y poder hasta llegar a desaparecer.
Entiendo que por esa misma razón y proyección social y política hacia un futuro mejor, por el bien de la humanidad, deberían de abolirse las religiones progresivamente a corto plazo. La sociedad no debería permitir su publicidad, su estrategia de apariencia benéfica y su propagación y avaladas por la costumbre y la tradición la permanente infiltración en la población con el único fin de perpetuarse en el poder civil al que trasladan el poder divino inapelablemente necesario para gobernar.
En la Europa liberal no ha habido guerras de religión desde que los principios liberales convirtieron monarquias absolutas en democracias modernas.
Otra cosa es la antigua Yugoslavia, tras años de dictadura comunista atea, los excomunistas usaron antiguas rencillas religiosas para enardecer a sus combatientes, con los resultados abominables ya comprobados, pero más bien los culpables son los políticos comunistas que no las religiones.
La religion como tal no sera causa directa, pero las limpiezas étnicas de Yugoslavia matando musulmanes que estaban en el sitio equivocada o el exterminio de los judíos fue por su religion…
Y los conflictos y atentados en Irlanda (que han durado todo el siglo XX) tambien fueron por religion…