Desde UPN, se contestó ayer mismo a Roberto Jiménez, asegurando que la formación regionalista se siente "libre" para alcanzar acuerdos con “cualquier partido que respete el Amejoramiento y la Constitución”. Por su parte, el PPN respondió a este aparente intento del PSN por reeditar el famoso “cordón sanitario”acusándole de sectarismo, recordando el acuerdo que el propio PSOE mantiene con el PP en la CAV, y requiriendo a los socialistas navarros para que fueran ellos quienes, tras las declaraciones de Txentxo Jiménez, rompieran los acuerdos municipales que mantienen en vigor con Nabai, una fuerza al margen de la Constitución y el Amejoramiento, en diversas localidades.
Corría el mes de mayo de 2007 cuando, tras perder UPN la mayoría absoluta, el presidente Miguel Sanz ofreció al PSN diversas fórmulas para un pacto de gobierno. Dichas fórmulas contemplaban un acuerdo estable y varias consejerías. El PSN rechazó el pacto e incluso meses después, cuando desde Ferraz se dinamitó el acuerdo con Nafarroa Bai, siempre se negó a formalizar un pacto con UPN. Desde entonces, el PSN ha votado con UPN o con Nafarroa Bai según le conviniera. Así, el PSN se ha apoyado en Nafarroa Bai para obtener diversas alcaldías, para poner plazo a la reprobación de Yolanda Barcina, para promover el aborto en la sanidad pública navarra, para rechazar la Red Madre, para excluir del concierto educativo a nuevos centros que ofrezcan educación diferenciada, y en general para amenazar a UPN votación a votación caso de no avenirse a sus exigencias. Llama la atención por tanto que Roberto Jiménez reclame una exclusividad que él mismo no está dispuesto a dar a UPN.
