> N. C. La detención del último grupo de terroristas de ETA ha aumentado la preocupación y las desconfianza sobre las intenciones de los etarras. A no ser que el Gobierno se esté dedicando a jugar al gato y al ratón para dar golpes de efecto antes de las elecciones, da la impresión de que los terroristas no se encuentran precisamente en estado de tregua y están engañando al Estado. Esta idea la refleja El Confidencial Digital, que recoge una supuesta conversación entre el Ministro de Defensa y amigo íntimo de Zapatero, José Antonio Alonso, y el propio Presidente. Se supone que en los últimos tiempos, Alonso es el principal responsable de la supervisión de los contactos con ETA, hasta el punto de que ha desplazado a Rubalcaba en alguna medida. Cuenta el periódico que Zapatero le transmitió al Ministro su inquietud ante la evidencia de que ETA continúa con su amenaza y le consultó sobre la conveniencia de informar al líder del PP, Mariano Rajoy. José Antonio Alonso le contestó: “Sí, José Luis, tienes que hablar con él, porque esto se está complicando. Nos hemos metido en una ratonera”. Parece que ambos dirigentes acordaron incrementar la presión sobre el entorno de Batasuna y frenar el afán de reunirse de Jesús Eguiguren, socialista vasco encargado de los contactos con ETA y sus siervos. La Guardia Civil estaba convencida de que los terroristas iban a volver a matar de inmediato, lo que llevó a su detención.