El PSN podría abstenerse para facilitar un gobierno minoritario de UPN.
Según el Confidencialdigital.com, Zapatero habría cedido a las presiones internas de su partido y habría decidido permitir un gobierno de UPN en una reunión celebrada el miércoles en Moncloa. A dicha reunión habrían acudido Zapatero, Chivite, Puras, Rubalcaba, de la Vega y Blanco. Incluso se habría celebrado una segunda reunión posterior en Ferraz. El mismísimo Alfonso Guerra habría llamado a Jaime Ignacio del Burgo para plantear un acuerdo de respeto a la lista más votada en Navarra y en Canarias. Lo que habría quedado descartado es un gobierno de coalición. La ejecutiva de PSN estaría decidiendo acerca de estos acuerdos en la reunión que tiene lugar en su sede de Pamplona en el día de hoy. No obstante todo lo anterior, este mismo confidencial incurre en contradicción cuando, en noticia separada, habla de que Puras viajó a Madrid pero no pudo reunirse con Zapatero y sólo habló y por teléfono con Blanco, algo que parece bastante extraño. Damos cuenta de ambas noticias para que sea el lector quien las valore.
UPN se viste de penitente.
Jaime Ignacio del Burgo y Carlos Salvador, en cumplimiento de la exigencia impuesta por Zapatero de pedir perdón por las supuestas ofensas e insultos vertidas contra los socialistas por los regionalistas, ya han empezado a mostrar signos de arrepentimiento porque “en toda campaña electoral pueden existir excesos verbales”. Del Burgo, medio en broma, incluso habló de retirar su nuevo libro (“Navarra, el precio de la traición”), si eso servía para propiciar el pacto. Empieza a ser la respuesta de UPN a las palabras de Zapatero en el Congreso: “El PSOE tiene principios y los socialistas navarros tienen principios muy profundos, y entre ellos está el de la dignidad. Mientras ustedes no rectifiquen lo que han dicho, tendrán la colaboración dificil pero no imposible”.
PSE: "En Álava y Navarra se ha votado por el cambio".
La Etb recoge las declaraciones del secretario general de los socialistas de Alava, Txarli Prieto, en las que éste afirma que tanto en Alava como en Navarra “se ha votado por un cambio”, y ha considerado “bastante razonable” que en consecuencia se produzcan “gobiernos de cambio” tanto en Alava como en Navarra.
Pernando no se fía del PSN.
Pernando Barrena sugiere abiertamente (no ha sido el único estos días) la posibilidad de un “tamayazo” en el caso de que finalmente los socialistas navarros decidieran pactar con Nafarroa Bai, e incluso con UPN: “no se puede perder de vista en Navarra el fantasma del caso Eduardo Tamayo y María Teresa Sáez”. Según Pernando, existirían en el PSN diputados capaces de convertirse en tránsfugas tanto si el pacto es un sentido como en otro.
Lo que sea menos UPN.
Gara recoge las declaraciones de la candidata de ANV a la alcaldía de Pamplona en el sentido de que, sin necesidad siquiera de un acuerdo previo, ANV votará lo que sea para quitar de en medio a UPN "aunque pueda suponer que tengamos que votar con la nariz tapada". En cualquier caso, parece evidente que ANV no considera que todos los partidos no nacionalistas sean igual de beligerantes contra las pretensiones de ANV, y de este modo distingue con su rechazo a UPN. Naturalmente ANV sigue fielmente la línea marcada por ETA en su comunicado tras el atentado de Barajas: “Las fuerzas democráticas deberían dejar a un lado al PP-UPN y a la derecha fascista del Estado español y atreverse a realizar la segunda reforma del Estado Español”. Veremos si ANV es la única que sigue las directrices de ETA.
