Entretanto, en Canarias, Libertad Digital informa que el alcalde socialista de Las Palmas acudía a un ritual masónico conocido como “tenida blanca”, convocado con el único propósito de mostrar el apoyo de la logia Luis Salats y Gusils a la nueva asignatura. Al acto acudieron también, entre otros, el ex presidente del gobierno autónomo canario Román Rodríguez o un vicerrector de la Universidad de Las Palmas.
Frente a todas estas situaciones, la respuesta que viene sosteniendo Carlos Pérez-Nievas, consejero de Educación, es la de reconocer como “infumables” muchos de los contenidos de los textos de EpC, pero presentándose a sí mismo como garante de que el estudio de EpC no perjudica gravemente la libertad: “sé que en otras comunidades existen textos infumables; pero si algún centro de Navarra pretendiera utilizarlos, esos libros serían retirados por el departamento”. Un argumento cuestionable cuando resulta imposible asegurar la continuidad de Pérez-Nievas frente al Consejería de Educación ni siquiera hasta el mes de abril. No parece, por otra parte, que la cuestión sea si abandonar la educación de los hijos en las manos de Zapatero o en las de Pérez-Nievas. Es a los padres a quienes corresponde esa responsabilidad, al menos mientras no se les arrebate judicialmente la patria potestad. Es por eso por lo que los colectivos de padres, más que contra los contenidos concretos, es contra la implantación obligatoria de la propia asignatura contra lo que objetan.
Seguramente para tratar de convencer a los padres de que, respecto a la educación de sus propios hijos, ellos son infinítamente más importantes que la airada profesora de Educación para la Ciudadanía de cualquier centro escolar, el presidente del Foro Español de la Familia, invitado por la plataforma Navarra Educa en Libertad, celebrará una conferencia el próximo jueves día 8 a las 20 horas, en el hotel Iruña Park.