Ya es oficial. Junts amenaza con dejar de sostener a Pedro Sánchez si el PSOE no convierte a Puigdemont en presidente de la Generalidad. Obviamente es lo más lógico que ha planteado en los últimos tiempos Junts. Es decir, después de todo Sánchez lleva casi 6 años de presidente (que parecen 600) y a cambio, ¿qué se ha llevado realmente Junts? ¿Una amnistía que en cuanto se publique se va a recurrir y que, por el caos jurídico que se va a generar, seguramente no va a permitir a Puigdemont volver de Waterloo con seguridad? Si Puigdemont vuelve inopinadamente de Waterloo, arriesgándose a su detención, no sería por la amnistía sino a estas alturas por un improbable brote de valor.
Si por consiguiente Puigdemont no va a poder disfrutar con plena seguridad de la amnistía, y por otro lado se queda fuera de la Generalidad, ¿por qué iba a seguir apoyando al PSOE? ¿Por un referéndum de autodeterminación? ¿No les ha dado una amnistía segura, ni la Generalidad, y les va a entregar un referéndum con garantías? Y hasta que fuera ese fantástico referéndum del 1 de vendimiario del año X del calendario republicano catalán, ¿van a apoyar gratis al puto amo? ¿Hasta ese punto iban a dejarse tomar el pelo o demasiado han tardado en caer del caballo?
El problema es que una cosa es dejar de apoyar a Pedro Sánchez y otra hacerlo caer. Es verdad que quedándose en minoría (recordemos una vez más que PP+VOX+Junts suman 177 diputados) Pedro Sánchez puede quedarse el resto de legislatura sin poder legislar, sin poder aprobar presupuestos, con el Congreso y el Senado en contra, pero durmiendo en Moncloa. Si es sólo de eso de lo que se trata, Pedro Sánchez puede acabar la legislatura.
Lo cierto es que ser socio de Sánchez tampoco se está revelando como un negocio maravilloso. El PNV tiene lo que siempre ha tenido, gobierne el PSOE o gobierne el PP. Bildu lo mismo que siempre también con un traja blanco. A Podemos se lo ha cargado. A Yolanda Díaz está a punto de cargársela. A ERC se la ha cargado también. ¿Dónde están para los socios de Sánchez los grandes beneficios de haber apoyado a Sánchez? ¿En Waterloo? Puigdemont ha visto la luz.
