El proyecto de Presupuestos Generales de Navarra para 2020 contempla un gasto de personal de 1.465 millones de euros, 118 millones más que lo contemplado en los Presupuestos de 2019. Para que se hagan una idea, sólo el incremento del coste de personal es como el coste de construir 2 pabellones Navarra Arena cada año, 8 en toda la legislatura. El famoso coste del llamado “peaje en la sombra”, por poner otro ejemplo, con unos 100 millones de euros anuales es inferior al incremento de los gastos de personal del nuevo gobierno. Otra forma interesante de visualizar este coste es pensar que representa casi 400 euros anuales por cada navarro ocupado.
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Todo lo dicho anteriormente se agrava bastante más si, en vez de tomar como referencia los Presupuestos del año pasado, tomamos como punto de comparación los Presupuestos de 2016, unos presupuestos “progresistas”, los primeros aprobados por el cuatripartito. Respecto a los 1.179 millones a los que ascendían los gastos de personal de aquel presupuesto, el que ahora barajan el PSN y Bildu representa un aumento de 286 millones de euros. Es decir, volviendo a los ejemplos anteriores, casi 5 Navarra Arena anuales, casi 3 veces todos los peajes en la sombra o 953 euros por cada navarro ocupado.
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Si retrocedemos todavía un poco más hasta los últimos Presupuestos aprobados por UPN, tenemos que el aumento anual en los gastos de personal llega a los 321 millones de euros. No es que queramos dramatizar, pero en una legislatura eso representa comparativamente más de 1.200 millones, que sería el equivalente a 20 pabellones Navarra Arena. Es más, con 1.200 millones se podría convertir en autovía toda la N-121 hasta Behovia y desdoblar los túneles de Velate.
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Si hubiéramos aprendido algo durante la crisis, tal vez recordaríamos que la recaudación llegó a caer hasta los 2.900 millones de euros. Sin embargo, si observamos los Presupuestos del PSN, Bildu y el Partido Comunista Chavista, nos encontramos con que el total de gasto presupuestado asciende a 4.557 millones. Es decir, que si hubiera una nueva crisis y la recaudación volviera a caer al entorno de los 2.900 millones, habría un agujero de 1.657 millones. Teniendo en cuenta que 1.465 millones serían los gastos de personal, quedarían 1.435 millones para pagar los 3.092 millones correspondientes a los gastos que no son de personal. O sea, que para ajustar los gastos a los ingresos, teniendo en cuenta que la capacidad actual de endeudamiento ya está al límite, podríamos asistir al espectáculo de ver al ultraprogresismo recortando y vendiendo a su gente la santidad de recortes por valor de 1.657 millones de euros anuales. Todo esto por no haber aprendido que los ingresos suben y bajan según el ciclo económico, a veces drásticamente, y por el contrario haber creado nuevas estructuras de gasto que después será complicado eliminar cuando lleguen las vacas flacas. Que llegan tarde o temprano.
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Un comentario
Para los socialistas está bien invertido. Construir un Navarra Arena no da votos, sin embargo enchufar a miles de personas al presupuesto público de por vida sí. Tú pagas