No sabemos si Rita Barberá era culpable o inocente. Lo que sí sabemos es que antes de morir fue tratada como si fuera culpable de todo lo que se le acusaba. No sólo se le trató desde el principio como culpable sino que se le hostigó, insultó, amenazó y escrachó de manera inmisericorde. Más aún, incluso después de muerta se le niega por parte de los líderes de Podemos un minuto de silencio bajo la presunción, una vez más, de que era una corrupta. ¿No solía ser la culpabilidad de la gente lo que había que probar?
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Responsabilidad política, responsabilidad penal e idoneidad para el puesto
En tiempos de confusión como estos, en los que perdemos ya hasta la humanidad, conviene distinguir conceptos tan básicos como la responsabilidad política y la penal. Es poco discutible la responsabilidad política de Rita Barbera en asuntos relacionados con la corrupción bajo su mandato. De algún modo, sin embargo, el propio PP no parece que tuviera claro que se puede y se debe asumir la responsabilidad política sin que eso signifique asumir una responsabilidad penal. Que alguien asuma la responsabilidad política por unos hechos, incluso por unas sospechas, sean los actos propios o ajenos, ya sea por una responsabilidad in eligendo, in vigilando o “in manteniendo”, no implica en absoluto que quien asume la responsabilidad política y dimite no sea inocente.
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Al margen de esto, pero relacionado con ello, se encuentra la cuestión de la idoneidad de alguien para ostentar una candidatura o un puesto político. Incluso siendo alguien inocente, incluso no habiendo reproche penal alguno que hacerle, incluso siendo totalmente injusto que todo el mundo piense mal de un candidato, el hecho es que si todo el mundo piensa mal de un candidato, aunque sea injusto, eso automáticamente lo convierte en un mal candidato, electoralmente hablando. Frecuentemente el PP tampoco parece ser consciente de esto. Obviamente una cosa es ser un mal candidato, otra la responsabilidad política y otra ser culpable o corrupto. Rita Barbera y el PP gestionaron mal su responsabilidad política y su idoneidad, pero eso no significa que la ex alcaldesa de Valencia fuera corrupta.
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La presunción de inocencia
Es evidente que Rita Barberá, que por otro lado tampoco es particularmente santa de nuestra devoción, no ha disfrutado en absoluto de la presunción de inocencia, al menos fuera del ámbito penal. No sólo es que se ha presumido que era culpable sino que, como decíamos, hasta después de muerta algunos políticos se han negado a participar en un minuto de silencio alegando que era una corrupta. El problema es que quien dice que Rita Barberá era una corrupta en realidad está haciendo una afirmación gratuita; es más, se trata de una acusación que en principio no debería poder hacer. Rita Barberá no tiene ninguna condena de corrupción sobre ella, lo cual es probable que sorprenda a algunas personas, a la luz de todo lo que Rita Barberá ha tenido que padecer incluso después de muerta. Más aún, el proceso en el que estaba envuelta y sobre el que ya no tendremos sentencia se refería al blanqueo de 1.000 euros para la financiación de su partido. No, no nos hemos comido ningún cero. Y eso en el caso de que hubiera sido encontrada culpable. Juzguen ustedes si hay una proporción razonable entre los 1.000 euros por los que estaba siendo juzgada y el ruido mediático que se ha generado.
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¿Un fallecimiento provocado por la presión generada?
Sería absurdo negar que el fallecimiento de Rita Barberá ha suscitado en muchas personas la pregunta de si se trata de una muerte provocada por la presión excesiva. Obviamente nunca tendremos con certeza la respuesta a esa pregunta. Lo cierto, sin embargo, es que incluso antes de su muerte había quien se planteaba la posibilidad de que alguien acabara muriendo de un infarto ante este tipo de presión. No es que esto confirme la hipótesis, pero tampoco ayuda a pensar que no hay relación. Por tanto al menos tiene sentido preguntarnos si no estamos alimentando más de lo aconsejable algunas presiones.
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Políticos que siembran el odio
De algún modo estamos en un momento en que pensamos que lo peor que puede ser un político es un corrupto. Naturalmente es muy malo que un político sea un corrupto, pero es probable que no sea lo peor que puede ser un político. Hitler o Stalin no han pasado a la historia por corruptos, sino por sanguinarios. Lo peor que puede hacer un político, con diferencia, es sembrar odio. Los odiadores en el poder son el peor de los males imaginables. El primer requisito para que alguien pueda ser homologado como político es que no siembre odio. Después vendrá que no sea corrupto, que tenga una formación, que diga la verdad, que sepa explicarse, que sea capaz de luchar contra el déficit… todo esto, siendo importante, es mucho menos importante a que no siembre el odio. Los políticos que se dedican a la corrupción, aunque indeseables, ahora mismo son como mucho el segundo problema más importante que tenemos con algunos políticos. Por lo demás, aparte de esta moraleja, no ponemos la mano en el fuego por nadie pero hasta que se demuestre lo contrario respetamos la presunción de inocencia de Rita Barberá. Descanse en paz.
14 respuestas
Curiosoa la doble vara de medir de la izquierda y el nazismo separata; pena de Telediario para los demás, para ellos presunción de inocencia a pesar de que han desaparecido miles de millones del erario público, sea caso Eres/Edu o caso Puyol. Y estos tan pimpantes disfrutando de lo robado.
El primer delito de Rita Barbera, como el de casi todos los políticos, fue estar en el cargo 26 años, hay que implantar el sistema de dos legislaturas máximo para presidentes de gobierno, parlamentos regionales y ciudades de más de 20.000 habitantes (las diputaciones es que las cerraría hoy mismo junto al Senado). I como dijo Azkuna, alcalde de Bilbao, en política hay que entrar con la vida resuelta, yo nunca voto si e candidato vive de la política
¿Alguien en este foro ha oído hablar de Carmen Heras?, no, ¿verdad?.
Pues esa Sra. fue condenada la primavera pasada a 8 años de inhabilitación por prevaricación.
Pero no deben preocuparse por ese desconocimiento pues, total, la Sra. Heras fue alcaldesa de Cáceres y, hasta su condena, presidenta del PSOE de Extremadura.
Sin comentarios.
Parece ser que, el juez que tomó declaración a Dña. Rita (EPD) iba a dar la próxíma semana el caso por cerrado, o sea, no ha visto que Dña Rita haya cometido delito.
¡Ah!, el juez en cuestión es Cándido Conde Pumpido, que fue Fiscal General del Estado nombrado por ZP. Creo que ZP todavía no se ha afiliado al PP, ¿no?.
Lo más escalofriante ha sido la reacción de las buenas gentes de Podemos. La incapacidad para mostrar un mínimo de humanidad o compasión. Lo del minuto de silencio, lo de que haya 5 millones de votantes de la version española de HB es una desgracia para este poble país
El artículo está muy bien… pero me sobra esta frase …»que por otro lado tampoco es particularmente santa de nuestra devoción» …
Ya sé que es una frase hecha, pero innecesaria -desde mi punto de vista- en este caso. Que en paz descanse Rita Barberá.
Muchas gracias.
Pues en realidad la sra.Barberá ( EPD) no es que no se sepa si era inocente o culpable, es que la presunción de inocencia conforme al articulo 24.2 de la Constitución le era de aplicación y por tanto tenia la consideración de inocente y que como establece el artículo 11.1 de la Declaración Universal de los Derechos del Hombre (1948) “Toda persona acusada de delito tiene derecho a que se presuma su inocencia mientras no se pruebe su culpabilidad ..». y por tanto conforme al TC si tenía la condición de inocente y tenía derecho a ser tratada ni como autora ni complice de hecho delictivo alguno. Solo en juicio celebrado con todas garantías con prueba de cargo se puede destruir o enervar la presunción de inocencia.
Obviamente al fallecer , jamás podrá seguirse el procedimiento penal contra ella , lo inmediato será el archivo por el fallecimiento Así que , con independencia de lo que sin mucho fundamento opinara alguna gente , sin saber siquiera por lo que en concreto a la Sra.Barberá se le tomó declaración como investigada por el instructor de la causa un magistrado del Tribunal Supremo , si sabemos que era inocente, i , pues con su fallecimiento su culpabilidad no se puede probar.
Desde que comenzó la transición España ha pasado por duras pruebas, entre ellas el terrorismo criminal del gang etarra, pero nunca desde entonces se ha visto mayor inquina repartida por ciertos grupos radicales y cada vez más el de enfrente no es un adversario político si no que pasa a ser cuasi enemigo o la descalificación en bloque .
Muy peligrosa la deriva y mucha responsabilidad de ciertas formaciones politicas.
En toda esta historia de la Sra Barberá se han venido mezclando una serie de conceptos porque, simplemente, interesa liarlo todo, para que los que salen peor parados, es decir, sus propios correligionarios políticos, pasen lo más desapercibidos posible.
Barberá fue la alcaldesa de una ciudad trufada por la corrupción, por una cadena de indefendibles políticas de inversión y endeudamiento y por la filosofía de disparar con pólvora de rey porque había que ganar las siguientes elecciones. Un análisis tranquilo de qué se ha conseguido en Valencia a base de cuántos recursos no soporta, ni mucho menos, una alabanza a la gestión de los diferentes equipos municipales durante la gobernanza de Barberá.
Y es que la corrupción, lo primero que produce son enormes deseconomías.
Estamos en un Estado sin separación de poderes, donde el poder político -al servicio del poder económico- dicta, desgraciadamente a qué ritmo y en qué dirección deben ir el Poder Judicial. El riesgo para el poder político está en que en sus luchas internas, saltan chispas que son las que llegan a los ciudadanos, porque a alguien o a algunos ha interesado que lleguen. El caso de Barberá y de toda su panda de amigos políticos no fue una excepción.
En la quema que se desató, ella, como pez gordo de un partido político, intento blindarse, tras la pérdida de las elecciones, recibiendo de su partido un apoyo inicial, a la espera de ir viéndolas venir. Y lo que fue llegando empezó a poner nerviosos a muchos.
Se comprobó que existía un cortafuegos entre el PP valenciano y la calle Génova por lo que, ante la posibilidad de nuevas elecciones, todos empezaron a intentar no contaminarse con la compañía de Rita. Esto fue muy duro para ella, lo que sumado a los derroteros que tomaban las investigaciones judiciales -salió de los juzgados el lunes muy tocada- y, vete a saber, una medicación fuerte, produjo su fallecimiento.
La mañana de su muerte y viendo el PP la que se le venía encima, se intentó montar a todo correr un homenaje en la Cámara Baja que sirviera luego de justificación de la «injusticia» que se venía cometiendo con Barberá -y, por tanto, limpiar el nombre del PP-, pero PODEMOS no entró al juego porque un minuto de silencio siempre es un homenaje y consideraba que Rita, sospechosa de corrupción y en constante atrincheramiento, a base de subterfugios políticos, para mantener su aforamiento, no se lo merecía.
Recordar sólo que la mesa del Congreso no aceptó, en su momento, el minuto de silencio tras la muerte de Labordeta, que además sí era diputado.
Rita Barberá es y será inocente mientras no se pueda demostrar lo contrario, pero su obra no ha sido ningún ejemplo ni de gestión, ni de proceder y, en el mejor de los casos para ella, ni de conocimiento de su entorno y de sus próximos, lo que resultaría totalmente alucinante.
Finalmente, Rita Barberá será siempre un recuerdo de lo que los tiburones dentro de un mismo partido pueden llegar a hacer, incluso con otros tiburones, como en su momento fue también la Sra. Barberá.
Rita Barberá fue imputada seis veces por denuncias de sus opositores (más bien enemigos) y los seis casos resultaron archivados o declarada inocente, el septimo, este último, también parece que iba a ser archivado, luego, de corrupta nada.
Cuando murió Labordeta ya no era diputado, aún así se le tributó, creo recordar, una cerrada ovación.
Podemos no puede erigirse en ejemplo para nada bueno. Ellos son los que rinden homenajes y piden la liberación de delincuentes como Bódalo o Alfon, Los que ensalzan las figuras de dictadores como Chavez o Castro (por cierto que hoy ha muerto, veremos como se manifiestan al respecto los podemitas). Hasta ahora lo que han demostrado es que rebosan bajeza moral y que no están reñidos con casos de corrupción.
El caso, señor Clarete2011 es que al señor Labordeta se le negó el homenaje oficial y solo se le pudo brindar una ovación espontánea y extraoficial.
Tengo la sospecha, y nos os voy a conceder el beneficio de la presunción, de que sois unos hipócritas que hubiéseis criticado a Podemos tanto si lo secunda, porque lo secunda; como lo hacéis porque no lo secunda, porque no lo secunda.
Respecto al ruido mediático, continúa la doblez argumentativa de NC y los medios de su órbita. Acusan el hostigamiento contra Rita Barberá mientras ellos hacen lo mismo con sus rivales políticos.
En este mismo medio vemos a diario cómo se hostiga sin ninguna consideración deontológica a; como por ejemplo cuando desde NC se pretendió virar una donación de 1200€ a una emisora de radio, en un caso de corrupción En ese momento este medio ni siquiera mostro empatía alguna por el proceso convaleciente por cancer de la persona utilizada para su montaje mediático.
Yo no veo mal la crítica política, aunque a veces sea de una manera dura, creo que un político debe estar preparado para estas embestidas, pero no estoy de acuerdo con los montajes periodísticos. Y en el caso de la sra. Barbera denuncias, hubo información y hubo mucha crítica: como debe de ser. Porque a dia de hoy, toda la corporación del partido popular del auntamiento de valencia está imputada.
Nadie podría entender que no se detuviese a un pederasta, por si le da por autolesionarse,… pues lo mismo pasa con la corrupción política, no podemos ni callarla ni pasar por alto, no sea, que se disgusten su señoría.
Si me pongo a corregir todos los errores de tipeo en mi comentario anterior, me extendería demasiado; pero sí voy a enmendar que donde dice «Y en el caso de la sra. Barberá denuncias», falta el verbo. «En el caso de la sra. Barberá hubo denuncias»
Claro que hubo denuncias, y mentiras y difamación en los medios, pero condenas en sede judicial ni una. Pero no importa, una por una hay que aplicar la máxima de Lenin (mal atribuida a Goebels, aunque eso es lo de menos) «una mentira mil veces repetida se convierte en verdad» porque ya se sabe que «la mentira es un arma revolucionaria», también de Lenin aunque repetida en algunos foros por «Coleta morada».
Pues nada, para ver que podéis decir ahora y si nada tenia que esconder, me remito al ultimo mensaje que envió Rita la » posible cantaora » a Interior. No hace falta que lo escriba, no?.
Si no tuviera nada que cantar, nada tendría que temer.
Entre mafiosos, nadie se sale del núcleo de rositas.
Da igual quien lo diga, sea Podemos o sea el que sea.
Los señores del PP de Valencia y de Madrid, han estado trapicheando con obra publica, privada y demás, os guste o no.
Respeto a quien roba y trapichea con el dinero de los demás????? Yo lo que es, no respeto a quien no respeta a nadie y mas sabiendo de donde procede su salario.