El camino de la propuesta.
La propuesta de Juventudes Navarras, en primer lugar, debe pasar el filtro de ser aprobada por la mayoría absoluta de los 16 miembros del Comité Ejecutivo de UPN. Si lo consigue, la ponencia será sometida al respaldo de la militancia en el Congreso. Si no consigue la mayoría absoluta, pero supera el 25% de los votos, la propuesta aún podría ser reintroducida como moción en los debates anteriores al Congreso.
Los estatutos de UPN y el derecho a pensar lo que se quiera dentro del partido.
En relación con toda esta polémica, hay que recordar lo que determinan los propios estatutos de UPN. Así, en el artículo 70, se establece que las Juventudes Navarras tienen “como fines específicos”, entre otros, “Difundir y defender los principios políticos constitutivos e ideológicos de UPN.”
En cuanto a cuáles son esos principios constitutivos e ideológicos, basta consultar al respecto el artículo 2, que establece que “Objetivo esencial de su acción política es la defensa y desarrollo de la identidad de Navarra, de sus derechos originarios e históricos, y de su permanencia como Comunidad Foral propia, diferenciada e integrada en la nación española”.
En el párrafo segundo de ese mismo artículo, se señala claramente que “Así mismo, UPN promueve los valores del humanismo cristiano.”
De todo lo anterior se deduce por tanto que Sergio Sayas podrá pensar muchas cosas, pero lo que quiera no. ¿Alguien se imagina que, propuesta por Juventudes Navarras la incorporación de Navarra a Euskadi, la respuesta de Sanz fuera que “tienen derecho a pensar lo que quieran”?