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La campaña de las niñas con pene y los niños con vulva suscitó el esperable debate e hizo aflorar datos tan inquietantes como que el 41% de los transexuales se intenta suicidar. Es decir, por un lado está el debate de si hay triciclos con dos ruedas y bicicletas con tres, y por otro el debate de si la transexualidad hace feliz a la gente. El elevadísimo porcentaje de intentos de suicidio entre los transexuales invita a pensar que la “reasisgnación” quirúrgica de sexo no es una solución demasiado eficaz. Es decir, quien defiende la ideología de género y el planteamiento de que hay niñas con pene y niños con vulva, no puede alegar como un argumento a su favor que si aceptamos su tesis el resultado es que todo el mundo será feliz. Es más, a la vista de los resultados cabría incluso argumentar la tesis contraria.
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Al elevado número de transexuales que intentan suicidarse tras haber intentado cambiar de sexo, se suma el hecho de que también existen muchos transexuales arrepentidos que, tras haber intentado cambiar de sexo, reclaman más tarde volver a su sexo biológico y su género original.
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Gracias a la red, más que a los grandes medios, es fácil encontrar casos como el de Chelsea Attonley, de nacimiento Matthew Attonley. A sus 30 años, Chelsea afirmó que quería quitarse los pechos y volver a tener pene, por lo que volvió a reclamar al estado una re-reasignación de género: «Siempre he deseado ser una mujer, pero ninguna cirugía puede darme un cuerpo femenino real así que siento que estoy viviendo una mentira». Chelsey Attonley aparecía muerto poco tiempo después.
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Paul y Maritza, dos transexuales arrepentidos, aseguraron en un debate de la CNN que habían decidido volver a recuperar su identidad y vivir conforme a su sexo de nacimiento. Además denunciaron que la reasignación de sexo de menores “es un experimento” en el que se usa a los niños “como ratones de laboratorio”. La psicóloga presente en el debate tuvo que reconocer que “no hay ningún examen objetivo ni subjetivo tampoco” avalando el cambio de sexo como una terapia efectiva, ante lo que los dos transexuales arrepentidos señalaron que “No saben lo que va a pasar con ellos». «La verdad es que ustedes no saben lo que están haciendo». Por las palabras finales del vídeo, da la impresión de que estos dos transexuales arrepentidos pudieron dar su testimonio en la CNN engañando a los productores del programa acerca de lo que iban a decir.
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Siempre que abordemos este asunto insistiremos en que tras este debate hay personas que tienen un problema, que sufren a causa de él y que merecen ser tratadas con todo afecto y respeto. Lamentablemente es posible que no haya una solución mágica a su problema y desde luego esa solución no está nada claro que sea la ideología de género.
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4 respuestas
Según cifras médicas, utilizadas por muchos sicólogos, el porcentaje de homosexuales que, tras un tratamiento adecuado aceptan contentos su verdadera identidad sexual es de 75%.
Sin embargo la Seguridad social no pago estos tratamientos, por que los homosexuales «no necesitan ningún tratamiento». El que no tiene dinero para pagarse un sicólogo privado tiene que aguantarse.
Paga en cambio los cambión de genero, con mucho gusto.
Aquí queda clara la manipulación a que estamos sometidos.
¡Como no!
A los Ingenieros Sociales de la Izquierda, que tanto les gusta toquetearlo todo…¿Cómo no iban a meterse también a tocarnos el sexo y cambiarlo a gusto de ellos, manipulando al individuo a su gusto hasta desmadejarlo completamente?
Queda clara también la falta de ética de la CNN, que no los hubiera aceptado de saber que iban a hablar en contra de la agenda. Y el papel lamentable del presentador, que es la voz de su amo.
La gente ya huele el pastel que los grandes medios intentan tapar, en este y otros asuntos.
Afortunadamente Internet, (también Navarraconfidencial) nos permite ver un poco mejor lo que hay detrás de la «verdad oficial».
Sin embargo el ministerio de la verdad no dejará de trabajar. Cuando oigan próximamente que la transexualidad tiene que dejar de considerarse una enfermedad, sepan que lo que se busca es precisamente que dejen de recopilarse datos estadísticos (como el de su
Sr. Ciudadano Caña: No me hable vd. de a quién le gusta toquetearlo todo en el tema del sexo y sea tan simplista de acusar a la izquierda de manipulación porque simplemente está viendo la paja en el ojo ajeno.
Es un tema harto complejo en el que no son capaces de ponerse de acuerdo médicos, psicólogos, psiquiatras, sexólogos… y todos aquéllos que se puedan ver implicados.
Está claro que la transexualidad es una «anormalidad» (entendiendo por ello como algo que se sale de lo normal) que a muchos nos pilla bastante fuera de juego a la hora de opinar y nada mejor que leer y escuchar para estar bien informados. Nada de sacudir a diestro y siniestro o culpar a los que siempre culpamos de todo.