Hemos de confesar antes siquiera de comenzar este análisis que en realidad ni siquiera tenemos muy claro si el peaje en la sombra es una buena o una mala idea.
Lo que se sí tenemos claro es que no es tan mala como a veces se presenta.
Por ejemplo, hoy es noticia que, según Comptos, el coste anual de los peajes en la sombra alcanza los 67 millones de euros.
Lo que sucede es que Navarra se ahorraría esos 67 millones no en el caso de que no hubiera peaje en la sombra, sino en el caso de que no hubiera autovías ni Canal de Navarra. Sólo en este caso el coste sería cero.
El peaje en la sombra es simplemente una de las formas que tiene el gobierno de financiar una obra.
Construir la Autovía del Camino se estima que tuvo un coste de 334 millones.
Mediante el peaje en la sombra, el gobierno no asume esa deuda ni desembolsa ese dinero de golpe, sino que le encarga a una empresa privada que sea ella quien lo haga a cambio de cobrar luego un «peaje» anual.
En total, hasta el 2032 la empresa concesionaria habrá cobrado 1.157 millones de euros. En esa fecha las infraestructuras pasarán a ser propiedad del Gobierno de Navarra. Eso es lo que nos habrá costado el peaje en la sombra a los navarros.
Pero imaginemos que el Gobierno de Navarra hubiera decidido pagar él mismo la construcción de la Autovía. Para eso hubiera tenido que pedir prestados los 334 millones pongamos que a un interés del 6% y a un plazo de 30 años. Eso significa que el Gobierno de Navarra hubiera tenido que pagar 935 millones por el préstamo más otros 73,3 que es lo que se calcula que cuesta el mantenimiento en todos esos años. Es decir, nos iríamos a una cifra superior a los 1.000 millones de euros.
Es por esto que decíamos al principio que no es que si no hubiera peaje en la sombra nos ahorraríamos 67 millones de euros, como a veces se ha publicado.
Eso sólo nos lo ahorraríamos si no hubiera autovías ni Canal de Navarra y la inversión hubiera sido cero.
Si en vez de peaje en la sombra el Gobierno de Navarra hubiera acometido todas las obras por sí mismo, es posible que en vez de 67 millones estuviéramos pagando 58.
Obviamente no es lo mismo que no pagar nada.
La pregunta es si merece la pena ese suplemento del peaje en la sombra después de sopesar los pros y los contras.
Por un lado en principio es cierto que pagaríamos algo menos.
Por otra parte, habría que ver siquiera si el Gobierno de Navarra tenía realmente la opción de hacer las obras por sí mismo, porque es posible que no hubiera podido acceder fácilmente al crédito dadas las circunstancias o que después hubiera sido un problema.
El peaje en la sombra tiene entre sus propiedades el no computar como deuda en los Presupuestos (eso ha traído cierta polémica con el estado central). Así a lo mejor hemos podido afrontar unas obras que por los límites de endeudamiento y las restricciones impuestas desde Bruselas quizá hubieran sido inviables de otro modo.
O bien hemos podido pedir prestado (y recortar menos) para mantener la Sanidad y la Educación en un momento de desplome de los ingresos, en vez de dedicar nuestra capacidad de endeudamiento para pagar las obras.
Por eso decíamos al principio que no lo teníamos claro respecto al peaje en la sombra, porque el asunto es complejo.
Pero no es cierto que si no hubiera peaje en la sombra no pagaríamos nada y nos ahorraríamos 67 millones al año.
Un comentario
Y cuando llegue el año 2032, incluiremos la Autovía del Camino en Audenasa, le pondremos unas cabinitas, seguiremos «asaltando» al usuario/contribuyente y nombraremos a algún lumbrera que no sepamos dónde meter, como «contador de coches», a 80.000€/año.
(Esto lo lee Sergio, y empieza a salivar)