Como decíamos ayer, la filial navarra del grupo vasco Noticias se descolgaba el domingo con un editorial a favor de un Impuesto de Sociedades para Navarra superior al de la CAV.
Sin embargo, el nacionalismo vasco jamás ha hecho ascos a la baja fiscalidad.
Tan entusiasta ha sido de bajar los impuestos a sus empresas que Ardanza hasta se inventó en 1993 aquellas famosas “vacaciones fiscales” por las que se ofrecía a las empresas vascas una reducción gradual durante 10 años de la base imponible del impuesto de sociedades, con deducciones sucesivas del 99%, 75%, 50% y del 25%. Además se ofrecieron créditos fiscales del 45% a las nuevas inversiones en activos fijos materiales. Varios cientos de empresas se beneficiaron de todo ello.
La Rioja y Cantabria denunciaron las vacaciones fiscales del PNV ante la Unión Europea por considerarlas una competencia desleal que incentivaba la deslocalización empresarial hacia la CAV.
Finalmente, la Unión Europea declaró que las vacaciones fiscales eran ilegales e incompatibles con los tratados comunitarios y el Tribunal de Justicia de la UE exigió que se recuperan las ayudas concedidas al considerarlas como “ayudas estatales incompatibles con el mercado común”.
Lejos de tratarse de un asunto acabado, el caso aún colea en los tribunales, que en estas fechas vuelven a examinar la cuestión no para decidir sobre la ilegalidad de la vacaciones fiscales vascas, que ya ha quedado determinada, sino sobre si se han recuperado todas esas ayudas que se concedieron ilegalmente. En caso contrario, la CAV se expone a una multa multimillonaria.
Cabe mencionar antes de concluir que una de las empresas implicada en todo este barullo fiscal fue según El País la Editorial Iparraguirre, sociedad editora del diario Deia.
Al margen de la dudosa coherencia del discurso nacionalista en general, ojalá que el Grupo Noticias no tenga que poner un euro para devolver ayudas gubernamentales recibidas ilegalmente en la CAV por parte de una de sus empresas, mientras por otro lado pide al gobierno que se machaque a las empresas navarras.
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4 respuestas
«Haz lo que digo, no lo que hago»
Bendito refranero español.
Amén (mal que le pese a Galtza…también,quiero decir, que le molesta todo lo cristiano y/español)
Pues esos somos cristianos y Españoles,y Navarros hasta que nos den sepultura,hasta entonces vamos a seguir dando caña ciudadano.
Dios mío, otra foto del impresentable e innombrable bobo solemne y observador de nubes que arruinó España, envalentonó a los nacionalistas separatistas gracias a que les puso el culo y la PASTA (NUESTRA PASTA) y, que vilmenente removió las cenizas de la guerra civil española gracias a su «memoria HISTÉRICA» vista desde sus pérfidos intereses. Sobre el bodrio que se masca allí por Huarte-Pamplona no hay nada más que comentar, huele que apesta a antinavarrismo, antiespañolismo y euskadianismo, les recomiendo que le cambien el nombre por el siguiente: Panfleto de Euskal Herria o Panfleto de la iglesia del espíritu santo ujueniano. Posteriormente a la compra del mismo se podría distribuir al sufrido lector una mascarilla y un nolotil.
Un dato: La Diputación vizcaína tiene establecido, para los jugadores del Athletic Bilbao, unos tipos impositivos en el IRPF que, por término medio, viene a ser el 20% de los ingresos. Nuestra Hacienda foral aplica a los de Osasuna el tipo ordinario que, para los ingresos que obtienen esos futbolistas, puede ser del 50 o el 52%. Consecuencia de esto es que a Osasuna le puede costar contratar a un jugador el 32% más que al At. Bilbao, puesto que en sus contratos se suelen especificar los ingresos en neto.
Esta doble vara de medir les parece perfecta tanto a los políticos «aberlaches» y «de progreso» como a sus mariachis y seguidores. Otro fruto más del relativismo imperante.