Bajo el título “Despido en Jangarria/Ausolan (C. Mondragon)”, la histórica militane de la izquierda abertzale, Miren Egaña, expone en una carta publicada por diversos medios abertzales el feo despido de su hija de la empresa Jangarria. Ausolan-Jangarria es una empresa del Grupo Mondragón que suministra menús saludables en los comedores escolares de Navarra. Egaña denuncia el despido de su hija el cual no comprende como resultado de la causa objetiva alegada por la empresa: el descenso de escolares en el centro donde trabajaba. La razón es que la empresa ha contratado a más personas en otros centros, pero ha despedido a su hija en vez de reubicarla en uno de esos centros que han aumentado la plantilla. Así las cosas, la conocida militante primero de Batasuna y luego de Aralar se pregunta: “¿Qué ha ocurrido para que despidan a una trabajadora fija discontinua?” Y “después de reflexionar”, Egaña concluye que las razones del despido hay que buscarlas en “aquella huelga de marzo de 2012, donde la encargada de Jangarria daba consejos a las trabajadoras: vosotras sabréis lo que hacéis, pero ateneos a las consecuencias, a ver qué pasa el año que viene… Un conflicto de cocina que trascendió a la gerencia con la inestimable ayuda de las representantes de ELA que, desgraciadamente, realizaron una labor de corre-ve-y-díle empresarial (casualidades de la vida mi hija había participado en las listas de ese sindicato). Por lo visto, las posturas y acciones que denunciamos en algunos sindicatos se dan en otros, aunque me fastidie (por no decir otra cosa) reconocerlo”.
Tras acusar de chivatos a los representantes de ELA o de señalar a la Corporación Mondragón como empresa que despide a los huelguistas, Egaña concluye su escrito asegurando que “el cabreo y la impotencia están ahí. Sobre todo cuando veo los anuncios de empresas de la C. Mondragón: aquí hacemos las cosas de manera diferente. ¡Ay si el fundador de las Cooperativas Mondragón levantara la cabeza!”.
Un poco de la desolación de Egaña nos alcanza también a los demás, que seguimos buscando una empresa “de progreso”, no digamos un sindicato, con una mínima coherencia entre sus palabras y sus hechos. Y si su discurso resulta inaplicable en la práctica, entonces lo menos hipócrita sería cambiar el discurso.
5 respuestas
Y si se descuidan, habrá sido con 20 días. Los mismo días que critican los.sindicatos…donde ellos no manejen el cotarro.
Personalmente pienso que es una mala noticia. Sin duda Mondragón ha sido un ejemplo a seguir durante algún tiempo. Ese mismo tiempo en que prácticamente todas las empresas lo eran, pero bueno.
Cuando han llegado las vacas flacas se ha visto que hay cooperativas que lo están haciendo bien, otras mal y otras muy mal. Y Jangarria es una de ellas. Básicamente el beneficio como corporación ha caído casi el 30% y sólo sobrevive gracias a las operaciones que tienen en China y Brasil alguna de sus «sociedades».
Para colmo la deuda financiera de Eroski y Fagor es un lastre axfisiante muy por encima de sus posibilidades. Lastre que va a ser soga a partir de Enero cuando sus ventas caigan todavía más por el efecto Mercadona.
En el fondo lo realmente preocupante es que este es el primer caso. Al ser cooperativistas, en principio no se puede poner a nadie de patitas en la calle, ya que son «socios», no «empleados» y siempre se ha conseguido la movilidad entre «sociedades». Desde hace un tiempo hay pocas «sociedades» capaces de asumir a los socios que vienen de otras que tienen pérdidas. Y lo que es peor… vienen más…
Pero está claro que estos chicos de la chiruca abandonan los principios en cuanto les tocan el bolsillo. No está mal saberlo para irnos preparando para cuando lleguen a Carlos III.
BTW, investiguen por qué Jangarria sirve comidas en la escuela pública Navarra y verán que sorpresón… y qué filón!.
No voy a poder dormir porque a la hija de Miren Egaña la hayan botado de la ubre dónde mamaba del filón inacabable de la infinita y próspera Jangarria!!! Abertzalia, aguanta tu vela y endurece tu trasero, que vienen mal dadas también para el arrano beltza; o que te pensabas bonita???
Desconozco el caso, al margen de lo que la sra Egaña cuenta. Para ella parece un gran problemón, para mí un despido más que unir a la enorme lista que, desgraciadamente, oímos todos los días.
A quien haya escrito este artículo se le debería caer la cara de vergüenza.
Enumero:
Primero: El artículo trata sobre una determinada persona que ha sido despedida por «X» motivo, no sobre la madre. Cierto es que la madre ha escrito el artículo, pero más cierto es que en la situación en la que estamos si la familia no se preocupa por lo más perjudicados no sé quien lo hará. Espero que jamás tengáis que denunciar públicamente vuestro despido. Aunque os lo merezcáis. Si no tenemos libertad de expresión para denunciar, dentro de la ley, por supuesto, lo que nos parece injusto, ¿qué nos queda?
Y segundo y más importante: ¿Qué tiene que ver el pasado de Miren Egaña? ¿Hasta que punto es determinante incluso para ridiculizar o menospreciar el motivo de despido de una tercera persona? Supongo que ningún familiar de NavarraConfidencial tiene ninguna mancha en su pasado.
Claro que sí, para hacer buen periodismo lo principal es indagar en el pasado de la familia de quien es noticia (o protagonista) para ver si su argumento tiene o no razón. Así se hace, chicos. Vais por el buen camino. Seguro que dormís plenamente orgullosos y satisfechos de plasmar la realidad sin manipularla.
Así que nada, mucho ánimo y a seguir con vuestro panfletucho de mierda haciendo PERIODISMO con mayúsculas.
P.D.: A algún que otro comentario me gustaría responderle, pero no hablo con estúpidos, y menos gratis.
Por cierto, soy amigo de la afectada. Y español. Tengo de abertzale lo mismo que vosotros de ética periodística.