Efectivamente UPN no tiene ni un solo crédito con la CAN. Respecto a los demás, ésta es exactamente la cuantía y el estado de sus créditos:
· El PSN tiene cuatro préstamos hipotecarios por un importe de 218.600 euros, de los que 33.000 están amortizados. Además de estos cuatro préstamos también tiene un préstamo personal de 70.000 euros, de los que 37.500 están amortizados. El total no amortizado asciende a 218.100 euros.
· Aralar tiene un préstamo por un importe de 230.000 euros, de los que ha amortizado 61.000 euros. Quedan por amortizar 169.000 euros.
· CDN tiene un aval por 26.000 euros.
· Izquierda Unida tiene un crédito de 157.000 euros habiendo amortizado hasta la fecha 16.000 euros. La cantidad no amortizada es de 141.000 euros.
Llama la atención que Aralar, un partido que la última vez que se presentó a las elecciones obtuvo 24.000 votos, tenga una deuda de 169.000 euros. La relación entre financiación y votos no es baladí puesto que los partidos reciben subvenciones en virtud de sus resultados electorales. El ratio del partido de Txentxo Jiménez es de 7 euros de deuda con la CAN por voto.
El mismo ratio aplicado al PSN es de 2,2 euros de deuda por voto tomando como referencia los resultados de las Elecciones Forales del 2007.
El caso más escandaloso es sin duda el de Izquierda Unida, que debe a la CAN casi 10 euros por votante.
Toda esta exposición tiene la limitación de que sólo refleja los préstamos que los partidos tienen contraídos con la CAN. Es decir, que se trata de un mínimo. Pero precisamente teniendo en cuenta la naturaleza y el organigrama de la CAN es por lo que resultan también los más interesantes. Resulta también llamativa la acumulación de deuda con la CAN de la izquierda navarra, dato por demás llamativo en la medida en que la gestión interna de cada partido en su casa puede ser un muy buen indicador de lo que haría en el gobierno.
