Si nos dicen que un gobierno ha subido reiteradamente los impuestos, que emite decenas de miles de millones de euros anuales de deuda, la cual crece y crece, y que con todo ello tiene un 7% de déficit (en realidad más) mientras existe una cosa que se llama Senado, otra que se llama Senda Viva u otra que se llama Reus Televisión, nadie que supiera de lo que está hablando podría decir que eso que acabamos de describir es una política neoliberal.
Entonces, ¿y los recortes?
El hecho de que antes hubiera un gobierno que en vez de un déficit del 7% tenía uno del 10%, no convierte al nuevo gobierno en neoliberal. Pasar de un gobierno que gasta un 10% más de lo que ingresa a otro que sólo gasta un 7% más de lo que ingresa no es cambiar un gobierno socialista por otro neoliberal. El nuevo gobierno, simplemente, es un poco menos socialista.
Y tampoco porque quiera, sino porque ni recauda ni le presta nadie dinero (lógicamente), así que no le queda más remedio que gastar un poco menos.
¿Qué sería neoliberal?
Que el déficit fuera cero, que se recortara y se reformara lo que fuera necesario para ello, que nos bajaran los impuestos, que todo lo que pudiera hacer, decidir y pagar la sociedad lo dejara de hacer, decidir y cobrar el estado, que no hubiera quedado ni una televisión autonómica, ni una sociedad pública innecesaria, ni un circuito, estación de esquí, parque de ocio o curso de cerámica o de danza del vientre pagado con dinero público. Que los empleados públicos no cobraran más que los que no son funcionarios por hacer lo mismo. Que además se hubieran separado e independizado los poderes del estado. Entonces podríamos haber empezado a debatir si tenemos un gobierno neoliberal… por primera vez en España.
Hoy por hoy, lo que tenemos es todo el socialismo que podemos pagar y bastante más aún, siendo ese bastante más aún la causa de nuestra quiebra y que no salgamos de ella.
En Suecia no hay salario mínimo, se puede despedir a los funcionarios, no existe déficit y además hay copago y cheque escolar. Con todo eso, se supone que es el paraíso de la socialdemocracia. Entonces, ¿qué es lo que tenemos aquí?
No se puede entender la política actual
Ni un socialista ni un neoliberal podrían entender la política actual. Rescatar cajas de ahorro, ¿es socialista o neoliberal? El estado no tiene dinero para pagar las pensiones, pero no ha cerrado ni una televisión pública autonómica. Preferimos tener un Senado perfectamente inútil que medicinas para los niños. El ayuntamiento no puede cerrar un boquete en la calzada, pero mantiene abierta una casa de cultura espectacular donde ofrece cursos de taichí. Cerramos el centro de salud del pueblo, pero mantenemos abiertas las piscinas. Reducimos el sueldo a los funcionarios pero aumentamos el número de policías forales, aunque en España hay más policías por habitantes que en cualquier país del mundo. No obstante lo cual, los delincuentes campan impunes por sus respetos. Los dos últimos gobiernos han preferido subir impuestos en plena crisis y gripar el crecimiento económico antes que cerrar estaciones y aeropuertos sin pasajeros. Puede que haya menos ambulancias de la DYA, pero mejor eso que dejar de rescatar a los clubes de fútbol. Un joven no tiene trabajo porque el restaurante en el que le podrían contratar está vacío, porque a los clientes les han subido los impuestos para pagar un Instituto de la Juventud que ofrece charlas sobre el paro juvenil durante la crisis. Por un lado se recorta, pero por otro se suben los impuestos. ¿Qué nombre se le puede poner a esta política? ¿Liberal? ¿Socialista? ¿O es sólo un currupipi errático de políticas contradictorias? Juzguen ustedes mismos, a partir de los resultados. Y si siguiéramos una política concreta y fallara, al menos sabríamos localizar el problema y cambiarla. El país lleva desde 2008 sin rumbo y sin capitán. Cada vez creemos menos en los políticos, pero cada vez somos más estatalistas y ponemos más cosas en sus manos (y por tanto más dinero y poder) esperando que sean ellos los que las resuelvan. Por esperar, esperamos de ellos que incluso se controlen y se vigilen a sí mismos. El gobierno no sabe hacia dónde tenemos que ir, ¿pero lo sabemos nosotros mismos? Pues a lo mejor el mayor problema que tenemos es eso.
6 respuestas
Durante muchos años se ha ido embadurnando el sistema político y económico de socialismo decimonónico. Ahora gruesas costras impiden la correcta movilidad de los mecanismos de esta sociedad. Los nazionalistas han contribuído grandemente a ello ya que sus quimeras sólo se harían realidad desde un estado sometedor de ciudadanos y sojuzgador de libertad.
Igual es demasiado tarde y por más vías de agua que se tapen ya entra agua en demasiada cantidad. Igual habría que tomar la decisión personal de huir. Yo no lo creo. En cualquier caso me quedaré luchando y trabajando hasta el último minuto.
Los gobiernos teóricamente «neoliberales»han venido encontrándose un sistema monstruoso basado en Papa Estado y por miedo e irresponsabilidad en vez de empezar a meter de verdad la tijera han ahondado en el problema.Los gobiernos solo piensan en los próximos cuatro años e insisten en «pan y circo para el pueblo».El sistema es insostenible y solo la falta de fondos acabará por cambiarlo.
Aznar, vuelve.
El artículo es muy bueno. Solo queda explicarse cómo es posible que millones de españoles sigan apostando por esta clase-casta superior política. Ahora y durante 4 años nos quejamos pero llega la hora de votar y..hay amigo, el miedo a lo desconocido. Con eso han contado en el partido PPsoe (inclúyase las siglas correspondientes a nivel local-regional)durante muchos años. El famoso voto cautivo. Votan y luego a fardar quién es el que más pone a parir al partido votado. A todos ellos, les animo a que recuperen la libertad, a que de una vez por todas se animen a votar en conciencia y en libertad. A que miren que hay más mundo a tan solo un palmo más de sus narices. Y que si no encuentran a quién votar entonces que se abstengan o voten en blanco (nunca nulo) pero, por el amor de Dios, dejen de votar a los creadores del problema una y otra vez cual ratón de laboratorio!!!!
Desde luego un gobierno que esta zurrando nos a impuestos a la clase media como no lo hizo ni la nefasta Sra. Salgado,la socialista,creo yo que va camino del peor socialismo,quien te ha visto Mariano,espabila que se te acaba el mandato.
Es claramente filosocialista, y diría más, con un poso de filocomunismo filosófico: pretende mantener el statu quo de una sociedad donde hay una clase dirigente político-sindical que domina a una elite financiera, económica y judicial, con el fin de repartirse un botín que se financia a base de un inflar un Estado híperdeficitario, un sector privado más endeudado todavía, y todo financiado por un pueblo mediante una presión fiscal muy elevada, y una deuda externa que financian organismos internacionales. En fin, para las elites el botín, para el pueblo -como siempre- miseria.