> N. C. El ya publicado éxito sin precedentes de la manifestación y del que se ha dicho casi todo nos lleva como siempre a buscar la confidencia. Quizá debido a un celo excesivo de las autoridades del Gobierno de Navarra, temerosas de que en la manifestación de ayer sábado se diera una imagen políticamente incorrecta ,se dio la orden a la Policía Foral de que requisara todas aquellas banderas en las que se exhibiera el escudo de Navarra con la Laureada. Varios ciudadanos pudieron comprobar cómo miembros de la Policía Foral les reclamaban dichas banderas, y en el caso de que se resistieran, les pedían su documento nacional de identidad. Sorprende la excesiva prevención ante una condecoración que ha formado parte del escudo oficial hasta el año 1981, entrada la democracia en nuestro país. Y sorprende más cuando en las manifestaciones de grupos de izquierda se permite sin complejos el uso de todo tipo de símbolos extremistas y preconstitucionales. Por ejemplo, no solemos ver que se retire la bandera republicana, que con su presencia desafía al orden político vigente.