> N. C. El próximo cuatro de octubre se estrena en el Teatro Gayarre (aunque hay un preestreno en Ansoain) la obra de José María Pemán “Javier, el divino impaciente”, dentro de los actos de conmemoración del V centenario de San Francisco Javier. Lo llamativo del caso, aunque tal vez no debiera sorprender a nadie del mundo de la cultura, es que el montaje, pagado por el Departamento de Cultura y Turismo, corre a cargo de los mismos de siempre. Para los medios de comunicación, Valentín Redín como director y actores como José María Asín, Miguel Munárriz, Pablo Salaverri, Marta Juániz, Maiken Beitia, etc., constituyen “lo más granado de la escena teatral foral” (Diario de Noticias dixit). Para los demás profesionales de las artes escénicas en Navarra, donde por la presencia de la Escuela Navarra de Teatro contamos con un número no desdeñable de buenos actores, directores y dramaturgos, este grupo es el que año tras año se lleva las mejores producciones. Ello no sólo se debe a su talento, que no discutiremos aquí, sino a que gozan de relaciones más que privilegiadas con los estamentos públicos. Por este motivo, las producciones con dinero público y, en particular, los montajes del Gayarre, han sido objeto de polémica en los últimos tiempos. Se celebraban procesos de selección abiertos que no eran tales y habitualmente siempre han trabajado muchos de los que hemos citado arriba. Pese a que nos consta que hay voluntad de una mayor transparencia y apertura en los proyectos teatrales, se ve que el propósito tampoco ha llegado para esta ocasión. También les diremos que muchas de las personas citadas ocupan además puestos de responsabilidad en Casas de Cultura de Navarra, lo que les convierte en juez y parte de la programación. Y en cuanto a la producción ejecutiva de “Javier, el divino impaciente”, la lleva la empresa Global, Servicios Culturales, a la que en su día estuvo vinculada la actual Directora del Teatro Gayarre.