“La ordenanza impide de facto el acceso al empleo público municipal a todos los ciudadanos no vascoparlantes e impone el euskera a todas las empresas y asociaciones que tengan una mínima relación con el Ayuntamiento”, así describe UPN la nueva Ordenanza del Euskera sobre la que está trabajando Bildu en el Ayuntamiento de Pamplona.
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El PSN, coincidente en este caso con UPN, señala que “Todas y cada una de las modificaciones previstas en la Ordenanza suponen una nueva vuelta de tuerca en la discriminación que Asiron ya ha comenzado a poner en marcha para acceder y trabajar en la administración municipal, dificultando en extremo la libre concurrencia al empleo público de la inmensa mayoría de la ciudadanía de Pamplona que no habla ni entiende el euskera”.
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Efectivamente, como no podía ser menos, la ordenanza no establece una discriminación explícita de los castellanoparlantes, pero genera una situación de la que esa discriminación será una consecuencia lógica y casi inevitable, sobre todo si depende de Bildu. De este modo, un derecho ilimitado a dirigirse a la administración en vascuence y a ser contestado en vascuence sólo puede garantizarse totalmente mediante un funcionariado plenamente bilingüe.
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La propuesta de nueva Ordenanza del Euskera establece que «será la plantilla orgánica la que determinará los puestos de trabajo que, por su mayor relación con el público o por su posición interna en relación a los procedimientos administrativos, precisen el conocimiento del euskera». La ordenanza resulta lo bastante difusa como para otorgar al Ayuntamiento un amplísimo poder a la hora de exigir el vascuence en casi cualquier empleo.
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El ciudadano, en la práctica, podrá dirigirse a la administración en español, pero parece deducirse que la respuesta de la administración siempre será bilingüe, o al menos toda la cartelería, rotulaciones y formularios serán bilingües, así como todas las indicaciones en obras y lugares públicos. De hecho, el vascuence será preeminente y será la lengua que aparezca encima, a la izquierda o primero, pese a que la inmensa mayoría de la población de Pamplona es castellanoparlante.
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La nueva ordenanza pretende asimismo que todas las empresas que gestionen o presten servicios municipales externalizados garanticen la atención a la ciudadanía en vascuence, lo que en la práctica viene a extender el requisito de vascuence para el empleo y la discriminación de los vascoparlantes también al ámbito empresarial privado.
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2 respuestas
La app de pago de la zona azul Telpark me ha contestado un escrito de queja acerca de que venga desde la última actualización primero en eusquera.
Me contestan que el ayuntamiento les OBLIGA a que aparezca el eusquera destacado en negrita y con una tipografía más grande que el castellano.
Cada día más Bildu hace patente su totalitarismo. Gobierna contra la población en general, la desprecia, abusa de la autoridad y se pasa por el forro la democracia.
¿De dónde ha salido ese supuesto derecho a ser atendido por la administración en un idioma minoritario? La administración debe facilitar la vida de la sociedad, no mortificarla.