La pretensión del PNV de introducir la autodeterminación en la Constitución ha pasado relativamente desapercibida. En parte porque la urgencia de la reforma venía determinada por cuestiones graves y totalmente ajenas a este asunto, en parte porque la inadmisión a trámite de la enmienda se encontraba ampliamente garantizada. El intento del PNV, no obstante, nos devuelve una vez más al recurrente debate de la autodeterminación en términos absurdos. Por un lado, como marca el derecho internacional, el derecho de autodeterminación no es aplicable a España. Una consulta sobre la autodeterminación, en la línea establecida por el Tribunal Supremo de Canadá para el caso de Quebec, en todo caso sería una posibilidad democrática (como convocar un referendum sobre la cadena perpetua, la subida del IVA o la monarquía) pero no un derecho. Por lo demás, el PNV insiste en que el sujeto de ese inexistente derecho sería el “pueblo vasco”. Algo que ya sólo defienden Bildu y el PNV en la CAV. A los navarros, sin embargo, nos gusta decidir por nosotros mismos, aunque para reclamar la autodeterminación el PNV se quede sin una parte esencial del sujeto. En general, puede pensarse que todo el planteamiento teórico nacionalista sobre la autodeterminación, sin derecho y sin sujeto, hace tiempo que ha quedado obsoleto.
2 respuestas
Habría que dejarse de tonterías y no dejar pasar ni una de estas gilipolleces a los nazionalistas. Y recortarle los espolones a tanto gallito de pelea.
Mira que son pesados estos nacionalistas, siempre erre que erre, con la que está cayendo…
Coincido con lo de recortarles los espolones de una vez….