El pasado sábado, Uxue Barcos pronunciaba un pequeño discurso ante los simpatizantes de Geroa Bai durante un acto en el Civivox Condestable, con ocasión de la apertura del curso político. En un momento del discurso, según han reflejado diversos medios, la presidenta reconoció que “aunque los ingresos están en la senda de lo que habíamos dibujado, no llegan a las necesidades que en estos momentos tenemos”, advirtiendo además que “yo no tengo miedo a la palabra recortes, os lo digo desde ya”. Barcos, no obstante, aseguró que no recortaría el gasto social.
Ante la repercusión de las palabras de la presidenta hablando de recortes, Koldo Martínez tuvo que comparecer posteriormente a explicar que Barcos no había hablado de recortes, para a renglón seguido confirmar que no afectarían a las políticas sociales. Al parecer ni Koldo Martínez ni el Diario de Noticias aprecian que hay una contradicción evidente entre decir que Barkos no habló de recortes y decir que la presidenta dijo que los recortes que pueda haber no serían en gasto social, luego habló de recortes.
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Pasado imperfecto
Para ser fieles a la realidad, lo cierto es que los recortes del gobierno del cambio no son una cosa que pueda suceder en el futuro inmediato, sino que son algo que ya ha sucedido y está sucediendo. Si hay más recortes en el futuro, serán recortes que se sumen a los ya decididos. Así, por ejemplo, cabe recordar que ya en el mes de junio se produjo un “bloqueo del gasto” de 23 millones de euros (un 0,6% del Presupuesto) al no cuadrarle la cuentas al tetrapartito. Que se utilizara la expresión “bloqueo del gasto” en vez de “recorte” evidencia que, contra lo que dice Uxue Barcos, sí hay miedo a utilizar esta palabra. Que aquel “bloqueo del gasto” de 23 millones incluyera partidas como 86.860 euros de ayudas a niños con parálisis, pone de manifiesto que tampoco es cierto que los recortes se hicieran al margen del gasto social. Pero hay más.
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Si alguien se toma la molestia de consultar los Presupuestos de Navarra del año 2010, verá que la partida de gasto en Educación ascendía a 688 millones de euros, frente a los 601 millones de los Presupuestos de 2016, aprobados por el gobierno del cambio. Es decir, que el Presupuesto del gobierno del cambio consolida un recorte, por ejemplo en Educación, del 12,7%. Con el agravante de que el gobierno anterior tuvo que administrar la cosa pública en plena depresión y el gobierno del cambio lo está haciendo en plena recuperación.
3 respuestas
A mi me ha dafo mucho más miedo la parte en la que dice «no llegan a las necesidades que en estos momentos tenemos”, a mi me da que esas necesidades no tienen nada que ver con un gobierno normal, sino con el proceso euskerizador forzoso al que nos están sometiendo, y a gastar en chorradas identitarias, en racismo folclórico, y en sembrar nuevos separatistas a base de odio y presupuesto, y cuyo fruto maldito será una negra camada de nuevos fascistas de la raza.
Ah, y a La Ribera, ni agua.
Como dijo un contertulio en este foro, los suyos, los del cambio, no recortan, administran mejor los recursos. Así cualquiera. Lo malo es que sus necesidades de gasto no tienen medida y tienden ad infinitum. Como siempre, la doble vara.
Recortan para repartirlo entre sus amigos y acólitos, entre otros los profesores que sepan vasco. Y a la Ribera, ni agua.