Ayer en Roma a las 21.20 horas de la noche, según informó el Opus Dei, falleció Mons. Javier Echevarría, obispo y segundo sucesor de san Josemaría Escrivá de Balaguer, fundador del Opus Dei. El vicario auxiliar de la prelatura, Mons. Fernando Ocáriz, le administró esa misma tarde los últimos sacramentos.
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Mons. Javier Echevarría había sido hospitalizado el pasado 5 de diciembre en el policlínico Campus Bio-Medico de Roma a causa de una leve infección pulmonar, que se empezó a combatir con antobióticos. El cuadro clínico, sin embargo, se fue complicando en las últimas horas provocando una insuficiencia respiratoria, que ocasionó el fallecimiento. Mons. Javier Echevarría tenía 84 años.
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El gobierno ordinario de la prelatura, según prevén sus estatutos, recae ahora sobre el vicario auxiliar y general Mons. Fernando Ocáriz. En el plazo de un mes se convocará un congreso electivo, el cual a su vez se celebrará en un plazo de tres meses, y que elegirá al nuevo prelado. La elección, no obstante, deberá ser posteriormente confirmada por el Papa. El Opus Dei es una de las instituciones más influyentes de la Iglesia Católica.
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Javier Echevarría, nacido en Madrid en 1932, comenzó no obstante los estudios de enseñanza primaria en el colegio de los padres marianistas de San Sebastián. Más tarde, ya de regreso a Madrid, cursó el bachillerato en el colegio de los hermanos maristas. En 1948, siendo aún muy joven, a través de un amigo contactó con algunos miembros de la Obra en la residencia de estudiantes de la calle Diego de León. La Obra había sido fundada en 1928 y se encontraba todavía en sus primeras fases de andadura. En septiembre de ese mismo año pidió su ingreso en el Opus Dei y en noviembre conoció personalmente a su fundador, san Josemaría Escrivá.
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Mons. Javier Echevarría comenzó los estudios de Derecho en la Universidad de Madrid y los continuó en Roma. Se doctoró en Derecho Canónico por la Pontificia Universidad de Santo Tomás (1953), y en Derecho Civil por la Pontificia Universidad Lateranense (1955). Fue ordenado sacerdote el 7 de agosto de 1955. Ha sido profesor de Teología Moral en el Collegio Romano della Santa Croce y en el Collegio Romano di Santa Maria. Colaboró estrechamente con San Josemaría Escrivá de Balaguer, de quien fue secretario desde 1953 hasta su muerte, en 1975. Miembro del Consejo General del Opus Dei desde 1966.
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Al frente del Opus Dei desde 1994
En 1975, cuando Álvaro del Portillo sucedió a San Josemaría Escrivá al frente del Opus Dei, fue nombrado Secretario General, cargo que hasta ese momento había desempeñado Mons. Del Portillo. En 1982, al convertirse el Opus Dei en prelatura personal, fue nombrado vicario general de la prelatura. Desde 1981 es consultor de la Congregación para las Causas de los Santos; y desde 1995, de la Congregación para el Clero. Tras su elección y nombramiento por Juan Pablo II como prelado del Opus Dei, el 20 de abril de 1994, el Papa lo ordenó obispo el 6 de enero de 1995 en la basílica de San Pedro.
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Es autor de los libros Eucaristía y vida cristiana (Rialp, 2005), Getsemaní. En oración con Jesucristo (Planeta, 2005), Itinerarios de vida cristiana (Planeta, 2001), Memoria del Beato Josemaría Escrivá de Balaguer (Ediciones Rialp, 2000) y Para servir a la Iglesia. Homilías sobre el sacerdocio (Ediciones Rialp, 2001), y de varios artículos en revistas y obras colectivas.
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Como prelado del Opus Dei, era además Gran Canciller de la Universidad de Navarra. El Gran Canciller es la máxima autoridad de la Universidad de Navarra, que ejerce todas las facultades y funciones necesarias para el buen gobierno. Junto a Cancillería, sin embargo, forma el Gobierno de la Universidad la Junta de Gobierno, integrada por el rector, que la preside, los vicerrectores, los decanos o directores de los Centros, el administrador general, el gerente, dos representantes de los estudiantes y el secretario general, que actúa como secretario de la Junta.
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El rector de la UNAV, Alfonso Sánchez-Tabernero, ha manifestado que acudía con mucha frecuencia a Pamplona como Gran Canciller de la Universidad de Navarra y últimamente también como paciente de la Clínica: «siempre atento a los problemas de los demás, lleno de esperanza y con una gran fe en Dios.»
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Un comentario
Hago referencia a las palabras del Papa, con fecha de hoy, referidas a Monseñor Javier Echevarría Rodríguez, Obispo prelado del Opus Dei:
“… paternal y generoso testimonio de vida sacerdotal y episcopal, a ejemplo de San Josemaría Escrivá y del Beato Álvaro del Portillo, a quienes sucedió al frente de toda esa familia… en un constante servicio de amor a la Iglesia y a las almas”
Y añado yo… Gracias Don Javier, gracias Padre, por su entrega generosa desde su juventud hasta el momento final en que la Guadalupana se lo ha llevado al cielo. Siempre pendiente de los demás, pensando y rezando por la fidelidad de todos, y de sus hijas e hijos hasta el último momento.
Buen humor, alegre, sacrificado, humilde, entregado, fidelísimo, divertido, simpático, con una gran vida interior… un hombre santo.
Gracias Padre, muchísimas gracias.