Según parece, Winston Churchill se quejaba de que cuando preguntaba sobre cualquier asunto a cinco economistas siempre obtenía cinco diagnósticos totalmente diferentes. Salvo que uno de los cinco economistas, añadía con extremada malicia, fuera John Maynard Keynes, en cuyo caso obtenía no menos de seis respuestas diferentes. Algo así parece que sucede también con la meteorología. Así hemos leído en la prensa navarra que la AEMET, Agencia Estatal (antes nacional) de Meteorología, pronostica un verano seco con temperaturas entre uno y dos grados más elevadas que las habituales. Un pronóstico, por lo demás, coincidente con el del Centro Europeo de Predicción a Medio Plazo (ECMWF).
Sin embargo el Centro de Predicción del Clima (CPC) de los EEUU, como se aprecia en los gráficos que les mostramos a continuación, pronostica un verano más lluvioso y más frío que la media. La noticia, por consiguiente, no es ni que este verano será más frío ni que será más caluroso que la media, sino que los meteorólogos no tienen ni idea del tiempo que hará este verano.
