Antiguamente, en los consejos de la CAN a los que acudían habitualmente casi todos los consejeros del Gobierno de Navarra, se repetía tradicionalmente el siguiente ritual.
Llegaban los miembros del Consejo a sus asientos y se encontraban con el acta de la sesión anterior, más los papeles necesarios para documentar el Orden del Día. Se discutía, se aprobaban los puntos respectivos y, al finalizar, había «costumbre» (ya que si a alguien se le olvidaba se le recordaba amablemente) de dejar toda la documentación encima de la mesa tal y como se la habían encontrado.
Cómo entonces aún (antes de la etapa de Goñi) no mandaban los políticos, sino los altos empleados, el método era eficaz para impedir fugas informativas. No eran ni remotamente las que luego llegaron a cobrarse, pero los consejeros a cambio percibían unas dietas.
Con la llegada del Imperio Galáctico y el ascenso al poder de Enrique Goñi apareció una novedad que ahora hubiera llamado extraordinariamente la atención. Junto al acta del día anterior y la documentación necesaria, de repente esta vez había una Tarjeta Visa CAN sin instrucciones de uso. Ya no hubo tampoco restricciones para llevarse la documentación al finalizar la sesión.
Es decir, que tarjetas hubo. Bien es cierto que aún no sabemos si eran tarjetas blancas o negras, si se retenía o no se retenía, si se dieron normas de uso y si estas estaban claras y eran de todos conocidas, si por tanto todo era legal o no lo era. Pero haberlas las hubo. Y si lo sabe NC, seguro que lo saben otros muchos. Claro que a lo mejor conviene esperar todavía unos meses a empezar a preguntar por todo esto, no sea que todavía estemos muy lejos de las elecciones. Si todo estaba claro y existe una explicación perfectamente normal, mejor exponerla pronto y atajar el asunto. Y si no, seguramente también.
8 respuestas
Que sigáis tejiendo un tupido manto sobre todo, TODO, lo que pasó en Carlos III 8, resulta repugnante.
Si tuvierais un poco de criterio, saldríais a la palestra a contar TODO lo que allí pasó.
Pero nada, tendremos que ser otros los que os lo vayamos recordando para mayor vergüenza.
Y después de lo de las tarjetas contamos lo de Ibercaja, ¿vale?.
Tarjetas Black había en todas las cajas, banquitos públicos con dinero de nadie, para que políticos y familia, y Famiglia, tuvieran crėditos todo trapo a bajo interés, y en alunos casos, hasta nula couta de devolución.
No hay más que ver cómo el PSOE e IU chillan por las esquinas pidiendo una y otra vez «un banco público para que fluya el crėdito»…a vuestros bolsillos, claro.
Espero que se siga investigando lo de esas tarjetas CAN Black, a ver si son de los abajofirmantes de Miguel Sanz o de los culichupantes de Goñi, que tanto da.
Aunque lo más extraño de todo es que Nuín, que estaba allí en contra del capitalismo financiero especulador, opresor, bla, bla, bla… no lo cuente.
saber a ciencia cierta si hubo tarjetas o no seria tan fácil como preguntárselo a quien durante años presidio la comisión de control que no fue otra que Yolanda Barcina
Ya tenemos los nombres y apellidos de otros 51 presuntos corruptos detenidos/as. 51 miembros de ese casta que hay que superar y encerrar, si han sido corruptos, en la cárcel devolviendo antes el dinero. Hay que dar libertad a esos técnicos y jueces honrados para que vayan a saco contra la corrupción, sea quien sea.
A ver qué caras tienen hoy en 13tv habiendo sido detenido uno de sus tertulianos, Granados, ex-secretario general del PP de Madrid.
Espero que todo el peso de la ley caiga contra esta gente sin escrupulos si ha realizado actos de corrupción.
Por cierto, cuando leo que la corrupción viene muchas veces de favores y sobres de constructoras, me viene a la cabeza el empecinamiento de UPN en hacer obras públicas innecesarias en Navarra, como el circuito de Los Arcos, TAV, Canal de Navarra….. ¿Por qué tanto empecinamiento?
A Javier-n se le olvida, que los ataques a las constructoras de la Autovía de Leizarán cesaron cuando la obra en el terreno se subcontrató en empresas del entorno abertnazi, averchalés, y averchandal.
Si se diera de comer a la Bestia, las críticas cesan, y los Trolls Javieres a la N potencia, se dedican a otras cosas.
Quizas se esten refiriendo ustedes a las tarjetas visa oro que se facilitaron a algunos miembros del consejo pero que eran con cargo a la cuenta personal de cada uno, que no deja de ser lo mismo que cuando uno recibe en su casa una tarjeta visa, con cargo a su cuenta, sin haberla pedido.
De momento, en esta comunidad el unico que ha protagonizado un escandalo relacionado con tarjetas fue el señor Del Burgo, que utilizo una tarjeta del Parlamento de Navarra para gastos particulares, dinero que tuvo que devolver. En su defensa dijo que «la tarjeta se les entrego con caracter totalmente personal y no se les dieron normas para su uso», o sea, mas o menos lo mismo que han dicho los de las tarjetas black de Caja Madrid.