La decisión del Tribunal de Cuentas de seguir investigando el peculiar sistema de dietas de Pamplona y a Uxue Barkos ha devuelto a la actualidad la denuncia de Justitia et Veritas, así como la recopilación de circunstancias curiosas que recogía esa denuncia. ¿Qué decía la denuncia que ha llamado la atención de este tribunal?
Barkos entregó en 2012 dos recibos asegurando haber participado en 218 reuniones en Pamplona. De estas 218 reuniones, 162 fueron «reuniones de grupo». Es decir, reuniones por libre entre los propios ediles de cada grupo respecto a las que no existe constancia de si se celebraron o no. Paralelamente, consta que Barkos acudió a 50 votaciones en Madrid. Resulta difícil cuadrar las cuentas considerando que el 2012 tuvo 239 días hábiles sin descontar vacaciones, puentes, Sanfermines y las semanas sin actividad en Semana Santa y Navidad. ¿Se reunía con su grupo en días inhábiles? ¿Dónde? ¿En su sede, en una cafetería, en Nochebuena? ¿Qué constancia existe de ello? ¿Por qué en las entrevistas de antes del escándalo decía que iba a Madrid los lunes y en las de después cambia la versión y dice que va los martes? ¿Para que le cuadren las cuentas a posteriori?
Por si fuera poco, más controvertido aún es lo que pasó en el segundo trimestre del año anterior.
Para cobrar el máximo en el segundo semestre de 2011, Uxue Barkos debía acreditar 87 reuniones. Alcanzar el límite no resultaba sencillo porque había faltado a 29 reuniones oficiales. De hecho, ese semestre sólo acudió a 10 reuniones oficiales. Finalmente, sin embargo, Barkos superó el nivel exigido y consiguió cobrar el máximo (10.440 euros) declarando 86 reuniones de grupo. Es decir, acudió a 10 reuniones oficiales, faltó a 29, pero en cambio acudió a 86 reuniones de grupo que es imposible verificar si se celebraron jamás.
El Tribunal Supremo archivó la denuncia contra Barkos precisamente porque, paradójicamente, no existe constancia alguna de las reuniones: “no existe constancia documental fehaciente del número de reuniones que tuvieron lugar, ni de quién acudió a ellas”. Al no poder probarse a cuántas reuniones acudió, no se pude saber si mintió o no sobre las que declaró. ¿Quién dijo que el sistema no era maravilloso? Para cobrar las reuniones no hace falta probarlas, para ser condenada sí, pero para despertar sospechas en buena parte de la ciudadanía…
Respecto al sistema de dietas del Ayuntamiento, no es aceptable que se pagara con dinero público por un trabajo del que, más allá de la declaración de la propia persona que lo cobraba, no existía constancia alguna respecto a si se hacía o no. Máxime cuando Comptos ya había señalado esta circunstancia en el 98. Todos los ediles con dedicación parcial, eso sí, tan encantados como retratados con el sistema. A ver qué dice el Tribunal de Cuentas de todos en general o de Uxue en particular.
¿Qué se puede decir de cierto de las dietas de Uxue Barkos?
Pues, como mínimo, parece bastante incontrovertible que Uxue Barkos ha cobrado decenas de miles de euros de dinero público por una reuniones que, salvo ella, nadie sabe si se han celebrado o no. No es lo más bonito y refrescante que se puede decir de una candidata a la presidencia.
5 respuestas
El sistema era malo, inverificable y falsible, cabe la duda de todos durante años, y más de los que nunca dijeron nada y ahora sepulcros blanqueados se rasgan las vestiduran mientras aullan…
Pero si te pillan en mentiras, en falsificaciones de firmas, en cambios de fechas para intentar cuadrar, en excusas lacrimógenas para tapar la falsificación de firmas (ya hay dos delincuentes, quien lo cobra y quien lo falsifica), y para mayor
lacra es imposible acudir a tantas reuniones en tan poco tiempo, ya es que no hay por donde coger el caso en la defensa de lo indefendible.
La paloma vuela ya con plomo en las alas, por toneladas, pero mientras no se la pegue antes del 24 de mayo, le da todo igual. Y despues, ya le dará todo igual, si consigue el poder.
Es lo que tienen los «partidos de autor». Que si el líder se viene abajo, no hay nada detrás, no hay nada encima, no hay nada debajo.
Suerte tiene AmadaLíder de que el Diario siga nadando entre dos aguas por si el 24 por la noche hay que rediseñar la cabecera al rojo, blanco y verde. En cualquier sitio esto sería un escandalazo que se llevaría a la candidata a tener que vivir de la política, ya que hasta ahora sólo ha vivido de su trabajo.
Y es que los personalismos acaban en ruina. Absoluta. Murió Santi Santamaría y el CanFabes duró dos meses, antes de que su viuda y su hija lo cerraran. Adriá quebró su Bulli cuando EL lo dominó todo.
Pero en Cordovilla, tampoco deben saber de gastronomía.
Y el lunes, vendrá Mariano y volverá a prometer quitar la Transitoria Cuarta…
Para una política,que está más pasada que la carne del rosky,¿regeneración? Con esta Palometa,o su compañera Gomez(que me acuerdo cuando estaba en Batasuna) llevan años y años,chupando de la política¿cambio? Si,que se vayan ya…..Que mas querían estas dos…que tener una puerta tan grande como la del Ayuntamiento para engordar sus carteras….Y dice esta señora del PNV que NO VIVE DE LA POLÍTICA…..será……
Sistema de dietas del Ayuntamiento de Pamplona creado y patentado por UPN para favorecer ante todo y sobre todo a sus propios concejales.
No sé qué me produce más desazón: el hecho de que quien así actuó le parezca correcto o el que sus seguidores defiendan su actuación.
Es difícil de creer que Uxue Barkos acudiera a todas las reuniones por las que cobró dietas. Es difícil. Y es inaceptable que se exija a terceros demostrar que no acudió: es ella quien debe demostrar su derecho a percibir dinero por acudir a unas reuniones.
Pero lo más triste es que haya quienes estén dispuestos a creer a Uxue Barkos porque es Uxue Barkos. Sospecho que la palabra de otra persona no les valdría para un caso igual.
Barcina cobró por no ir a la UPNA 18 días un sueldo para rellenar sus ingresos entre el tiempo en que dejó de ser alcaldesa y fue elegida presidenta. Tenía todo el derecho de su lado, pero hizo trampas. Aquel fue su génesis en un camino ingrato e incómodo en el que su falta de ‘superioridad’ moral le hizo imposible hacerse con la autoridad y casi diría que ni con el poder.
En la vida, cuando se gana haciendo trampas se ha recorrido un camino que no se puede retroceder y desde ese punto hay que caminar.