El resultado, elaborado a partir de una encuesta en la CAV a chavales de entre 12 y 16 años, muestra claramente la gran diferencia respecto al rechazo a ETA que se aprecia entre los distintos estudiantes según el tipo de centro y el modelo lingüístico.
Centros públicos y concertados.
En concreto, la primera diferencia apreciable la encontramos entre los centros públicos y concertados. En los colegios concertados de la CAV, el rechazo a ETA es alto o muy alto entre el 74% de los estudiantes. En los públicos, sin embargo, este porcentaje desciende hasta 66,2%.
Modelo A (español) y modelo D (vascuence).
Más significativa aún es la diferencia que se aprecia en su rechazo a ETA entre los estudiantes del modelo A (español con asignatura de vascuence) y el modelo D (vascuence con asignatura de español). De este modo, el rechazo a ETA es alto o muy alto entre el 81,2% de los alumnos del modelo A en español. Significativamente, este mismo porcentaje desciende hasta el 62,1% entre los estudiantes del modelo D en vascuence.
La relación entre el tipo de colegio (A) y el rechazo a ETA (B), pero sobre todo entre el modelo lingüístico y el rechazo a ETA, resulta innegable en este estudio. Puede resultar precipitado deducir automáticamente de estos datos si A es causa de B o si B es causa de A. No se pueden negar tampoco otros factores coincidentes, también reflejados en el estudio, como el rechazo a la violencia etarra en el seno de la propia familia (C). Lo que no se puede negar, no obstante, es la frecuencia con la que A y B aparecen juntos.