La izquierda de toda España se manifiesta en Madrid (con discreto éxito de asistencia) para pedir al gobierno que rectifique su política de recortes. Paralelamente la izquierda navarra, que también se opone a los recortes, incluye en esa oposición el recorte del número de diputados en el Parlamento de Navarra. Justifica su negativa con el argumento de que menos diputados en la cámara foral equivale a menos control del gobierno. Lo cual es un poco extraño porque como todo aumento o disminución es proporcional, más diputados en la cámara significa más diputados para la oposición… pero también para el gobierno. Hablamos de recortes y hablamos de control al gobierno.
Manifestantes en la Luna
El gobierno no puede rectificar su política de recortes. Pensar que sí puede implica el error de creer que el gobierno tiene la alternativa de recortar o gastar y puede elegir la que quiera. Pero esa alternativa es falsa porque para mantener el gasto el gobierno tendría que tener un dinero que no tiene. Por tanto no puede rectificar su política. Es más, ningún otro gobierno podría cambiarla porque para mantener los gastos no sólo hace falta la voluntad de mantenerlos, sino el dinero para hacerlo. En realidad, ¿quién dice que al PP, a UPN o a cualquier otro partido no les gustaría seguir gastando y gastando? De alguna manera medio país parece no enterarse de que no hay dinero para mantener el gasto y la oposición juega la partida demagógica de hacer como que sí existe. Recaudar más tampoco se puede y si tienen ustedes alguna duda echen un vistazo a sus carteras o a los resultados de haber subido los impuestos. El estribillo de que los 100.000 millones anuales de más que nos hemos estado gastando pueden venir de una subida de impuestos a las rentas altas (que ya pagan muchos impuestos) es pura demagogia: lo que nos cuesta el estado es muchísimo más que todo lo que ganan las rentas altas. Hacen falta reformas estructurales de gran calado para tener un estado más pequeño y más eficiente. Lo que nos lleva al punto siguiente.
Controlar al gobierno es recortar al gobierno
No se puede pedir más estado y más control al gobierno al mismo tiempo. Pedir más estado es más bien todo lo contrario: dar más poder al gobierno. Cuantas más competencias damos al estado, mayor tamaño adquiere, sobre más ámbitos de nuestra vida toma decisiones, más dinero nos cuesta, menos control tenemos sobre el gobierno y más controla éste nuestras vidas. La izquierda en general, admitámoslo abiertamente, no quiere que los ciudadanos controlen más al gobierno sino que el gobierno (los políticos) controle más a los ciudadanos, aunque supuestamente sea por nuestro bien. Si no lo quiere con sus palabras lo quiere con sus actos o esto por lo menos es lo que se deriva de ellos.
Sólo la democracia no basta
Incluso en una democracia, la capacidad de decisión que ostenta un ciudadano frente al gobierno bordea el ridículo. Sólo en Navarra hay más de 480.000 votantes, lo que significa que cada uno de nosotros tiene una capacidad de decisión del 0,000002% (una probabilidad menor a la de que nos toque la Lotería Nacional). Es decir, que nuestra capacidad de influir sobre el gobierno es realmente insignificante. Obviamente, sin embargo, la capacidad del gobierno de influir sobre nuestras vidas individuales resulta brutal. Por consiguiente, la única forma de asegurar más capacidad de decisión sobre nuestras propias vidas y menos control del gobierno sobre nosotros es menos estado. Es probable que siempre haya una serie de cosas que las tenga que hacer el gobierno, pero controlar el gobierno es procurar que el estado se limite a hacer sólo esas cosas esenciales y sólo de la forma más eficiente posible. No sólo es que así seremos más libres, es que además sólo así el sostenimiento de esos servicios esenciales resultarán económicamente viables.
Un comentario
Si llevamos a sus últimas consecuencias las.ideas de Bob & Moscoso, papito estado controlará nuestras vidas con chip en la oreja incluido, y para controlarlos a ellos bastará un delegado del Nuevo Orden Mundial, eso sí, Maestro Grado 33 de los Caballeros Iluminati de Baviera.
Más allá de eso sólo queda Matrix…la primera.
Y a los abertzaloides les da igual mientras la única lengua sea la.suya. Todavía no han descubierto el.sonido dual de la TDT y les.engañarán como a chinos del Goiherri.