Llevado por su celo de defender y extender el euskera, el gobierno de Navarra, para que luego digan, se ha pasado de largo rotulando en euskera. El caso ha tenido lugar en el nuevo edificio del Palacio de Justicia de Tudela. Aunque la localidad se encuentra en la zona no vascófona, en el rótulo de la fachada podía leerse “Palacio de Justicia, Justizia Jauregia”. Según informa Diario de Noticias, los arquitectos que diseñaron el proyecto consultaron previamente al departamento correspondiente del Gobierno de Navarra, que en un primer momento les indicó que se rotulara en español y en euskera. Algún tiempo después, el mismo departamento trasladó instrucciones en sentido contrario ya que por ley determinó que el rótulo bilingüe «no era correcto». En consecuencia se solicitó la retirada y sustitución del rótulo, con la evidente duplicidad del gasto.
El exceso de celo del gobierno por extender el vascuence cuesta dinero
Si alguna conclusión se puede extraer de este sucedido es, por un lado, el esfuerzo que le cuesta a la administración foral el cumplimiento estricto de la legalidad, reprimiendo su ímpetu de rotularlo todo en euskera por toda Navarra. Por otra parte que este exceso de ímpetu, si luego hay que cambiar el rótulo, nos aboca a una polémica innecesaria y, sobre todo, nos cuesta dinero a todos.
5 respuestas
Lengua «koiné» es el idioma en que se entienden todos los presentes, para comunicarse, aprender, comerciar, viajar. Ya tenemos una en toda España para eso. Y el inglés por el resto del mundo de habla no-hispana. Sólo se tendría que rotular en Español salvo zonas turísticas o de viaje/transporte, que se debe utilizar también el Inglés.
«Quadratisch, praktisch, gute.»
Tan sencillo como práctico. Es bueno.
Aludiendo exclusivamente al hecho relatado, lo que me parece un desatino es el tener que sustituir un letrero porque en él haya otro idioma más (por otra parte, cooficial en la Comunidad Foral).
Lo entendería si en el cartel hubiera un mensaje sólo en euskera; pero, así, de este modo, me parece una imbecilidad, un intento de cualquier cosa menos de ser respetuosos con un idioma digno de perpetuarse.
Yo creo que ya está bien de politizar la cultura. Soy partidario de la apertura de fronteras y del entendimiento de los pueblos. A lo mejor suena como muy utópico en estos momentos de crisis del sistema global, pero es lo que siento.
Y la mejor manera de entenderse es crear cauces de relación; y, para eso, tenemos los idiomas. Ya basta de utilizar cualquier idioma como proyectiles, cuando deberían ser herramientas de entendimiento entre los seres humanos.
Sí al euskera, sí al castellano (¿o español?), sí al francés, sí al inglés, si al alemán, sí al chino…, si con ello dos seres humanos llegan a entenderse en sus necesidades de transmitir sus vivencias.
Salud para ti y los tuyos.
Sería contradictorio y no conforme con la razón y el orden social llevar a cabo una “discriminación positiva” para reponer en la sociedad un uso lingüístico – el vascuence escrito – que no se manifestó en la historia de Navarra como medio de comunicación social. Sería como querer reponer una tradición que no existió, utilizando como argumento el hecho de que hay que reponer las tradiciones.
Ante esta realidad, y para reconducirla hacia el futuro, se debe apoyar una filosofía, una actitud, en que los gobiernos forales pudieran ser vistos por la ciudadanía más como árbitros o protectores de todas las lenguas y culturas – cada una en su respectivo ámbito según su realidad histórica -, que como conductores determinantes de una política lingüística de “diktat” por ley y decreto, como ha ocurrido desde 1982. Quizá en esta actitud, menos conductora y más neutral – sin imposiciones de “ordeno y mando” – aceptando la influencia natural, involuntaria y espontánea entre las lenguas, aceptando también el papel que la historia asignó evolutivamente a cada lengua, esté la clave para alcanzar un amplio consenso entre las diversas fuerzas políticas en Navarra.
Los principios que deben inspirar esta filosofía son:
• aceptar la realidad histórica del carácter mayoritario y de uso prioritario cultural escrito de la lengua española y del minoritario y de uso restringido no cultural, de comunicación oral, del vascuence en todo el territorio de Navarra, según la costumbre inveterada de la realidad social y de la evolución histórica de la misma.
• otorgar el carácter de lengua de uso en la Administración a una sola lengua, la de mayor difusión y comprensión entre la población, la de más larga tradición popular como medio de comunicación escrito, en la situación actual, la lengua española.
• ayudar a despertar y cultivar el interés por conocer el pasado histórico de cualquier habla, dialecto o lengua autóctona, sea de origen vascónico o romance latino.
• apoyar la enseñanza de todas las lenguas y continuar la enseñanza oficial en la lengua de mayor tradición histórica de uso – a la sazón la lengua española – apoyando no obstante cualquier iniciativa privada que pudiera manifestarse para impartir la enseñanza en vascuence.
• rechazar «proyecciones míticas de la leyenda» en el origen de las lenguas y apoyar simplemente su utilización presente como medio de comunicación social.
• defender la convivencia social entre cualquier habla y lengua.
• oponerse decididamente a que una lengua de nueva refundición como el «batúa» anule la raigambre de los dialectos vascuence navarros, contribuyendo a que éstos salgan de su incomunicación cultural ( ).
• rechazar la utilización del vascuence en Navarra como vehículo proselitista del “nacionalismo lingüístico”, afirmando su utilización únicamente como medio de comunicación y entendimiento social y descartando que pueda ser utilizado como medio de progresión política del nacionalismo vasco y de la integración de Navarra en las ambiciones separatistas vascas.
• fomentar que la esencia histórica de Navarra no es la lengua – en cualquiera de sus manifestaciones – sino una historia de Reyno en común de todos sus territorios y habitantes, la foralidad, la autonomía política y su contribución a la formación y cohesión de España, propiciando que los vascoparlantes «sean y se sientan» igualmente navarros expresándose a su gusto en vascuence o en español.
Fuente: http://www.lebrelblanco.com/libro/?cat=210
Mientras el mundo evoluciona…., unos cuantos quieren «desevolucionar», porque en esa «desevolución» han encontrado su pesebre, otros cuantos viven en la ambigüedad porque en «esa ambigüedad» han encontrado también su pesebre, otros cuantos se retuercen en sus sillas aunque son consentidores, porque en «ese retorcese pero consentir» han encontrado su cómodo pesebre y unos pocos, los muy menos,… «se rebrincan».
Y mientras esto sucede aquí, en otros lugares del mundo se ríen del precioso tiempo que perdemos en estos temas tan poco estratégicos … y que nos hacen gastar tanto dinero y perder tantas y tantas oportunidades.
» que son galgos… que son podencos».
Lo que parece absurdo es gastarse un dinero en eliminar algo que, objetivamente, no hace daño a nadie.