El festival de los inquisidores quemados y las inquisidoras hipócritas

El caso Monedero ha crecido en las últimas horas. Los testimonios contra él se acumulan. Al parecer, el comportamiento de Errejón no era excepcional sino la norma en el mundillo podemita. El próximo salpicado podría ser Iglesias. El modelo de mujer en el nuevo orden social podemita ideal parece que era la groupie, la fan obnubilada, medio chiflada, cabezahueca y dispuesta a todo para ser la elegida del líder. Podemos más que un partido es una secta tántrica. En el partido morado podemos encontrar que todo lo que denunciaban como machismo lo han elevado a la máxima expresión de puertas del soviet para adentro. Las mujeres ocupan una posición sumisa y subordinada respecto al varón. Los que dirigen el relato y toman las decisiones son hombres. La misión de las mujeres es ratificar acríticamente a su líder y seguirle al baño cuando va a refrescarse. Todas son fotocopias. Todas vuelcan su furia desatada al inexistente enemigo exterior incapaces de ver que el enemigo está dentro.

El octavo pecado capital es la hipocresía, y Podemos sabe un rato de hipocresía. Los testimonios primero contra Errejon, ahora contra Monedero, mañana contra el que todos intuimos, no sólo ponen de manifiesto un comportamiento totalmente contrario al que se predica por parte de sus figuras masculinas, sino también por las femeninas. Las masculinas porque tratan a las mujeres como ganado, y las femeninas porque se dejan tratar de ese modo. Todas las defensas feministas caen cuando el enemigo es de los míos, porque se han tragado el discurso de que el problema es la ideología en vez del comportamiento. Son totalmente incapaces de reconocer a los enemigos internos, lo mismo que son totalmente incapaces de ver algo que no sea malo fuera de su muro ideológico.

La hipocresía femenina en el ámbito de Podemos resulta tan llamativa como la masculina. Si en el sector masculino la hipocresía es el Torrente que llevan dentro, en el sector femenino es la traición permanente a todo su discurso. El yo sí te creo hermana decae por completo cuando la hermana señala con el dedo a alguno de los prebostes del soviet supremo. Entonces aparece la omertá feminista para proteger a los líderes de la secta. La magnitud de la hipocresía es proporcional a la fiereza con la que señalan y persiguen a los herejes, reales o no, en el perímetro exterior de la secta. Todas las informaciones de las últimas horas resultan escandalosas no sólo por los comportamientos de los afectados, sino por el comportamiento encubridor de las guardianas de la ortodoxia.

Las informaciones publicadas y los testimonios aflorados, por otro lado, evidencian también la complicidad en la omertá de la prensa progresista. La hipocresía, la sumisión sectaria, las gafas de madera ideológica y la doble vara de medir adornan a los medios y pseudomedios de la izquierda con idéntico esplendor que a la dirección política de la secta. El timo es por tanto estructural. No es que Errejón o Monedero tal y cual, es que la hipocresía y el silencio cómplice es el modus operandi habitual en todos los estratos de este mundo circular.

Compartir este artículo

3 respuestas

  1. Las mujeres comunistas se rodean de hombres comunistas y les pasa eso. El problema es el comunismo, ideología nihilista e inmoral, que da lugar a comportamientos inmorales. Luego se quejan.

Deja una respuesta

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

  • Navarra Confidencial no se responsabiliza ni comparte necesariamente las ideas o manifestaciones depositadas en las opiniones por sus lectores. Cada usuario es único responsable de sus comentarios
  • Los comentarios serán bienvenidos mientras no atenten contra el derecho al honor e intimidad de terceros, puedan resultar injuriosos o calumniadores ,infrinjan cualquier normativa o derecho de terceros , empresa, institución o colectivo, revelen información privada de los mismos, incluyan publicidad comercial o autopromoción y contengan contenidos de mal gusto.
  • Se procurará evitar en lo posible los comentarios no acordes a la temática publicada
  • Navarra Confidencial se reserva el derecho de eliminarlos

Información sobre protección de datos

  • Responsable: Navarra Confidencial
  • Fin del tratamiento: Controlar el spam, gestión de comentarios
  • Legitimación: Tu consentimiento
  • Comunicación de los datos: No se comunicarán los datos a terceros salvo por obligación legal.
  • Derechos: Acceso, rectificación, portabilidad, olvido.
  • Contacto: info@navarraconfidencial.com.
Logo_Positivo.webp
Logo_Positivo.webp

Suscríbete a nuestro boletín