No se trata de menospreciar los sacrificios de los funcionarios sino de poner en valor el esfuerzo del sector privado. Tanto los trabajadores del sector público como los del privado tienen que soportar los errores de los políticos. Pero los del sector público no han padecido un ajuste tan brutal como los del sector privado. Particularmente en lo relativo al empleo, que es el apartado a través del cual se llevan a cabo en este país casi todos los ajustes.
Desde el 2007, el sector privado ha perdido en Navarra 26.100 asalariados. Simultáneamente, el sector público (funcionarios + otros empleados públicos) ha ganado en cambio 800. Las cifras podrían cambiar algo según las fechas que tomáramos pero en todo caso la conclusión sería siempre la misma: todo el ajuste en el empleo, el más duro y dramático, se lo ha comido el sector privado.
Alguien podría pensar que menos mal entonces que el sector público, en conjunto, no ha reducido personal, o el problema del paro sería aún peor.
No obstante, este punto de vista no tiene en cuenta el hecho de que los sueldos de los que trabajan en el sector público se pagan con los sueldos de los que trabajan en el sector privado. No sólo es que los asalariados públicos han aumentado y los privados han descendido, además es que los costes de pagar los sueldos públicos han crecido a lo largo de estos años.
Añadamos a todo lo anterior que los sueldos de los funcionarios son mayores que los de los demás y que los demás con trabajo cada vez son menos, para comprender que el esfuerzo de mantener los costes de personal de la Administración cada vez resulta más difícil de soportar y exige más impuestos. Naturalmente al exigir mayores impuestos el consumo y la inversión caen y el paro crece en el sector privado. Para que el ajuste de personal sea menor en un lado, el ajuste tiene que ser mayor en el otro. La peor parte se la lleva el sector privado.
5 respuestas
Yoli, cariño, echaste a Bob Jiménez pero parece que te dejaste dentro a 3000 enchufados social-upeneros para mayor gloria del Quesito. Y cobrando muy buenos sueldos.
En la administración pública y sobre todo en las empresas públicas. Echalos a todos y haznos un favor. Bueno, dos, de paso tendrás dinero para bajarnos los impuestos. No te olvides de lo segundo.
Desde luego es una pecularidad «foral» que toma además un período de tiempo muy largo; a partir del nuevo Gobierno (diciembre 2011) la destrucción de empleo se ha producido en el sector público, por una parte y, por otra, la pérdida del poder adquisitivo del sector público es del 23,7%.
En el caso de España, aun si tomamos ese período el aumento del sector público entre 2007 y 2011 se produjo fundamentalmente en las autonomías no en el Estado central.
Y los funcionarios en nuestra medida salarial contribuimos a gastar y reactivar el sector privado: ¿dónde compramos? ¿Qué consumimos? Afortunadamente no somos un Estado soviético y consumimos y gastamos en el sector privado (no tenemos economatos ni cantinas estatales donde nos den todos los productos básicos a precio inferior al del resto de los mortales).
Pero vamos, debe ser el top trending de la semana el tema de los funcionarios.
Primero: frente al reiterado y consolidado comentario de café ni Tal ni Cual han reducido el número de «empleados públicos», quizá no estuviera de más ver qué medidas se han tomado, si se cumplen,qué ha sucedido, etc. El periodo 2007-2010 inclusive por lo que se refiere a «empleados públicos», no sirve. Se podría atender al comentario de Fernando de la Hucha. Segundo: echar de golpe a los 300.000 que según algunos sobran, se dice muy pronto, pero quizá no sea tan fácil; incluso, ¿podría ser hasta socialmente imprudente?
Tercero: la petición de algunos para que los gobiernos creen empleo ¿no les parece que hay que tomársela con sordina?; y con pavor la oferta de algún gobernante que promete, como si estuviera en su mano, la creación de empleo.
Comprendo que el Profesor de la Hucha defienda lo suyo, pero el argumento de que los empleados públicos consumen en el sector privado y que por ello contribuyen a la economía es flojito.
¿Acaso si no trabajasen en el sector público no consumirían estas señoras y señores? ¿Quiere decirnos el profesor, que los empleados públicos serían incapaces de ganarse el «currusco» en el sector privado? ¿Deberíamos hacer la vista gorda a las mafias del Este, porque dinamizan el sector inmobiliario de la costa? A fin de cuentas: «pecuniam no olet» que dijo Vespasiano.
Es claro que hay que redimensionar nuestro sector público porque no podemos pagarlo. Lo demás, «filfa»
Esta claro que hay que adelgazar el sobrante de lo público,que pagamos todos los Navarros.En lo privado ya llevamos unos años ajustándonos el cinturón.