Recordarán ustedes el monumental escándalo que se levantó al inicio de la legislatura a cuentas de las cesantías de los anteriores miembros del gobierno y otros altos cargos. Se trataba de un hecho intolerable y vergonzoso. Un caso más de la corrupción dentro de la ley característica del régimen que el gobierno del cambio venía a tirar abajo. ¿Qué ha sucedido desde entonces con todo ello?
X
Por estas mismas fechas allá por el año 2017, el Parlamento de Navarra escenificó una pequeña mascarada elevando al Congreso de los Diputados, en Madrid, una propuesta para modificar la ley, en virtud de la cual los miembros de las cámaras autonómicas pudieran dejar de cobrar estas cesantías. Todos los partidos del parlamento foral votaron a favor de esta iniciativa menos el PPN, precisamente por lo que se señala a continuación.
X
La impostura saltaba por las costuras en el momento en que todas esas fuerzas del cambio, que acusaban al anterior gobierno de la corrupción de las cesantías, de repente se daban cuenta de que no se podían eliminar sin cambiar una ley general, para lo cual no era competente el Parlamento de Navarra.
X
Poco importa en otras ocasiones para las fuerzas del cambio, no obstante, tener o no tener competencia en algún asunto. Es más, la falta de competencia les viene bien para generar un conflicto con el estado.
X
El remate de la mascarada, no obstante, eran que las fuerzas del cambio hubieran podido promover directamente ese cambio en el Congreso por sus propios medios, a través de los diputados de sus propias fuerzas, y hasta hubieran tenido mayoría para hacerlo. O sea, que por un lado el asunto se aparcaba en el limbo del Congreso en Madrid y por otro lado, aquí, los diputados del cambio se lavaban la cara haciendo como que ellos habían hecho lo que habían podido pero que, llegado el momento, no les iba a quedar más remedio que seguir cobrando las cesantías también a los prebostes del cambio.
X
El último episodio, sin embargo, es que el gobierno del cambio ha introducido una pequeña y discreta modificación legal en los Presupuestos, en virtud de la cual los consejeros y directores generales que eventualmente cesen en sus cargos y vuelvan a trabajar en la administración lo harán con un sobresueldo del 25% hasta su jubilación. La medida, en caso de pinchazo electoral en mayo, podría beneficiar al menos a cinco consejeros y alrededor de una veintena de altos cargos nombrados por el cuatripartito. Así que, entre korrika y korrika, devolver la dignidad a la política y las instituciones era esto, según el gobierno del cambio.
X