La plataforma Respeto por Navarra presentó a principios de este mes una queja ante el Defensor del Pueblo de Navarra contra la ofensiva exposición de Abel Azcona.
La queja ha encontrado acogida en el Defensor del Pueblo, que ha dirigido una carta a Joseba Asirón, alcalde de Pamplona.
En dicha carta, el Defensor del Pueblo no aborda la queja concreta por encontrarse el caso pendiente de resolución judicial. No obstante, Enériz realiza una sugerencia de carácter general de que «se garantice que los contenidos de las exposiciones artísticas que se autoricen en los locales y salas de titularidad municipal, sin perjuicio de la libertad de creación y expresión artística de los autores que expongan, tienen en cuenta las creencias religiosas, las distintas sensibilidades y el pluralismo de la sociedad pamplonesa y, en su caso, respetan los derechos de terceras personas, adoptando, cuando proceda, las medidas oportunas en pro de una mejor convivencia».
El Ayuntamiento tiene ahora dos meses para informar de si acepta esta sugerencia, que legalmente el Defensor puede lanzar a los órganos competentes de las administraciones públicas para lograr una mejora de los servicios públicos, así como para procurar las soluciones más adecuadas en defensa de los intereses legítimos de las personas. En este tiempo, por su parte, el Ayuntamiento podrá interponer las alegaciones u observaciones que considere oportunas.
He aquí el texto completo de la carta del Defensor del Pueblo al alcalde Asirón:
4 respuestas
Yo por si acaso no cejaría en el esfuerzo judicial. Que una cosa no quita la otra.
Y a ver si espabilamos, que este gobierno además de tatuada una esvástica redondeada, y el batúa en toda la frente, guarda fuera de la vista un «666» diminuto pero significativo.
El defensor del pueblo es una institución inutil, hecha para figurines. «Tarzan» Eneriz, siempre entre dos lianas: «Sin perjuicio de la libertad artistica…» deben «tenerse en cuenta sensibilidades…». O sea, el envoltorio para uno, el palo para otro, y el chupachus… ya se verá, pero no seré yo, Teflón Eneriz, el que se pegue a un bando-
Señores, a proposito de la expozcona, como de muchos otros temas, la pataleta ante del DDP es eso, una pataleta. Hay recursos a la administración y la via de los tribunales. Si unos u otros no admiten el asunto, simplemente, ocurre que no hay asunto.
No es de recibo en una democracia «quejarse». Eso no existe en el ordenamiento jurídico y a nivel político, vaya si puede reirse el ofensor. Le puede importar poco que le formulen una «queja»… .
En un sistema democrático de legalidad con separación de poderes, el Legislativo ya ha hablado, los delitos están ya tipificados en el Código Penal. Ahora corresponde actuar al Ejecutivo, para poner a disposición Judicial los presuntos delincuentes. Existen más que indicios. Existen acciones «in fraganti».
Una “reacción airada” es poco. Precisamos más: una “reacción violenta” por parte de la Ley.
Yo no soy de apostar, pero doy por hecho que las demandas contra el asunto , sean la que ha ojeado la fiscalia como la interpuesta por esa papanatesca asociación de abogados católicos quedarán archivadas. Una vez la exposición es autorizada poco puede hacerse contra lo expuesto en ella. Y evitar la exposición solo es posible mediante un sistema de adjudicación de salas que contemple censura previa de los contenidos, cosa inadmisible, salvo si el Obispado se hubiese reservado ese derecho al ceder el edificio, cosa que no hizo . Eneriz lo sabe y hace lo que mejor sabe. quedar bien con todos y salir de la piscina seco.