Diario de Navarra publica hoy una historia inquietante, la historia de Darling, una mujer que vino de Nicaragua en 2013, que está regularizada y que lleva todos esos años viviendo en Navarra, trabajando como cuidadora y limpiadora, al día, sin colchón financiero para sucesos adversos. Este pasado mes de enero se quedó sin trabajo y por ende sin vivienda con dos hijos menores a su cargo. En la unidad de barrio les dieron unos bonos para dormir, pero esos bonos ya han expirado y en la Oficina de Servicios Sociales de Zapatería 40 le han dicho a Darling que no vuelva. En el albergue tampoco puede alojarse porque ir con una niña de 7 años, en vez de una razón de más, es un motivo para quedar excluida (?). Hasta el 13 de febrero no le han dado fecha para empezar a gestionar (no a cobrar, a gestionar) la Renta Garantizada. La mujer obviamente está desesperada.
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¿Cómo es posible que esto suceda?
Es decir, pagamos al gobierno la mitad de lo que ganamos, ¿no es precisamente para que no sucedan cosas como esta? ¿No nos gobierna la izquierda más estupenda justo para atender estos casos? ¿Cuándo los va a atender? ¿Ahora que se ha publicado en los medios? ¿Cuántas personas hay como Darling?
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Alguien podría pensar que menos mal que gobierna la izquierda, pero este caso nos pone más bien en el punto contrario. Es decir, pagamos unas cantidades enormes de dinero a la administración, la administración es un elefante saturado de hormonas del crecimiento, pero justo para esto no funciona, que es para lo que debería estar. Es decir, hay dinero para comprarle un palacio a la izquierda abertzale en Francia, o para prestarle a Davalor aunque fuera una empresa zombi ya en 2015, o para montar una facultad de Medicina, o para rotular en vascuence en Corella, o para poner vuelta al aire Pío XII, pero no hay dinero para una persona en la situación de Darling, que en un momento de adversidad podríamos ser cualquiera. ¿Y esto es así a pesar de que gobierna la izquierda o por culpa de que gobierne la izquierda estatalista?
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No por gastar más la izquierda es más solidaria
Cuando exigimos austeridad y una administración pequeña pero eficaz, es precisamente por esto. Nos achicharran a impuestos, el gobierno nos sigue endeudando pero el dinero no está donde hace falta con urgencia. El dinero está subvencionando a medios afines al gobierno, manteniendo a los sindicatos y partidos, o incluso al Defensor del Pueblo de Navarra, cuyo presupuesto podría poner bajo techo a decenas de familias y cuya desaparición pasaría inadvertida. El alcalde está muy preocupado buscando inmuebles para alojar a los okupas, pero Darling no tiene quien le preste una ayuda. Bueno, sí, al final quizá Cáritas o la parroquia. Si,introduciendo otra derivada, no fueramos tan estatalistas y lo delegáramos todo en el gobierno, quizá también habría más instituciones privadas capaces de encargarse de las personas como Darling, aunque naturalmente el estado tendría que estar ahí como último recurso. Algún día habrá que revisar con una sierra eléctrica el gasto público no para recortar derechos fundamentales, sino para garantizarlos, y para liberar a la clase media fiscalmente asfixiada de una carga insoportable que sirve para pagar montones de cosas prescindibles, pero que no paga todas las fundamentales, lo segundo precisamente por lo primero.
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