Finalmente, este sábado se celebró el esperado congreso del PPN, quinto de la formación popular en Navarra pero primero tras la ruptura con UPN. Una ruptura que, tras 17 años de matrimonio en régimen de gananciales, lógicamente supone una auténtica refundación casi a partir de cero para el PPN. A fecha de hoy, ni siquiera tiene un candidato que encabece la lista al Parlamento de Navarra. A mayor abundamiento, el congreso del PPN ha venido precedido además de una agitada disputa interna que hasta el último minuto podría haber desembocado en la suspensión cautelar del mismo. Dentro de este clima de interinidad e incertidumbre, la desestimación judicial de las peticiones cautelares de Nieves Ciprés libera al PPN de un escándalo mayúsculo. La elección de Cervera como presidente, por otro lado, sienta las bases de una futura bicefalia salvo que Cervera (a pesar de las dificultades) termine siendo también el candidato. Para bien o para mal, entre las características de Santiago Cervera no se cuenta precisamente la de pasar inadvertido. Además cuesta pensar ahora mismo en alguien del PPN capaz de hacer pasar a su presidente inadvertido. Aparte de Nieves Ciprés, de existir ese alguien parece lógico pensar que hace ya un año que lo habríamos conocido.
En conjunto, la imagen del PPN resulta extremadamente débil a fecha de hoy. La principal causa, probablemente, es la carencia de un líder, cabeza de lista y candidato a la presidencia del gobierno de Navarra. La razón es evidente: sin un candidato, la postura del PPN resulta virtual respecto a cualquier asunto. Respecto a cualquier cosa que hoy diga alguien del PPN, mañana el candidato siempre podría decir que nunca fue él quien lo dijo.
El espacio electoral del PPN.
Resulta pertinente un pequeño análisis de las posibilidades de maniobra del PPN a partir del espectro político navarro. En principio, el PPN comparte un territorio electoral similar al de UPN. El espacio que le deja UPN es el que queda libre a la derecha cuando se arrima al PSN. Este espacio no lo pueden ocupar otras fuerzas como Nabai, CDN, IU o PSN. Cuanto más se junte UPN al PSN, más espacio le deja al PPN. Inversamente, cuanto más se acerque al PPN, más difícil será su relación con el PSN. Desde la posición del PPN, el partido más próximo con el que pactar un posible gobierno es UPN. En realidad, UPN es en principio para el PPN el único partido con el que alcanzar un pacto de gobierno. En este sentido su posición estratégica y negociadora es más débil que la de UPN que, siempre que la aritmética parlamentaria lo permitiera, podría elegir entre pactar con el PPN o con el PSN. El PSN, con más limitaciones políticas que aritméticas, también puede elegir en principio entre pactar con Nabai o con UPN. Para aspirar al gobierno, por su parte, Nabai sólo puede pactar con el PSN. Desde este punto de vista, la posición estratégica de UPN y PSN es más fuerte que la de Nabai y el PPN.
De todo lo anterior se deduce que el PPN nace con una posición estratégica clara aunque débil: crecer a costa de UPN para, en su caso, pactar con UPN. El pasado sábado, Diario de Noticias subrayaba en el título de la crónica del congreso que ”El PPN evita la confrontación con UPN”. Interesa destacar este interés, seguramente bien calculado, por evitar la confrontación. UPN es actualmente el granero de votos del PPN. Al contrario que a UPN, al PPN le interesa una frontera con pocas barreras entre ambas formaciones para facilitar el paso sin esfuerzo de votantes de UPN. Al PSN, contrariamente a lo que se pudiera pensar, le interesa un PPN fuerte que le quite escaños a UPN. Esto es así porque la estrategia del PSN para obtener el gobierno de Navarra pasa por conseguir más escaños que UPN. Una primera vía para ello es aumentar su propio número de votos, mientras que una segunda vía (no excluyente respecto a la primera) es reducir los de UPN.
Dentro de estas coordenadas, aún sin candidato, busca su espacio en Navarra el PPN.
7 respuestas
Hábiles o no, los affaire de Ciprés, no me parece una buena forma de comenzar la andadura del partido en Navarra. Cervera u otros responsables tendrían que haber hecho algo para que la imagen que se ofreciera no fuera tan mala…
Una clara falta de dialogo y de negociación.
¿Donde cabe el PPN?
Sería bueno que respondiéramos a esta pregunta sectorialmente, es decir distinguiendo temas específicos. Por ejemplo, en:
* política lingüística
* política económica y estado de «bienestar» (estado nodriza)
* etc.
¿Puede Navarra Confidencial proponer un inventario de «sectores»?
Pues yo veo bien que a Nieves Ciprés (iniciales NC, por cierto…) no se le deje presentarse si no tiene los avales suficientes. Aunque sólo le faltara uno solo. Si no llegas, pues no llegas. Y me parece bien que haya un mínimo de avales para que no puedan presentarse 40. Sería muy bonito, pero inviable que se dieran a conocer los 40. En cualquier caso podríamos discutir la necesidad de un mínimo de avales, pero si se pone un mínimo es para todo el mundo, también para NC. ¿Que NC entonces monta un lío y se va a los tribunales? Pues el PP quedará muy mal si la justicia le da la razón a NC. Pero NC quedará muy mal si le da la razón al PP.
¿Son imaginaciones mías o Navarra Confidencial no era muy amiga de que Alberto Catalán se presentara a disputarle la presidencia a Yolanda Barcina? ¿Democracia interna? Sí, cuando interesa.
La identificación delespacio político en el espectro derecha-izquierda y aritmética parlamentaria que plantea NC (NavCon) me parece correcto, pero y el espacio particularismo-interés general, clientelismo-interés general, cierre-apertura… Quizá aquí el espacio coincida con el convaleciente (o terminal) CDN
Un espacio donde también creo que hay hueco para el PP es al oeste de la tentación napartarra, de algún modo siempre presente dentro de UPN. Baste recordar el «Navarra es una nación», de algún ex-dirigente de UPN.
El espacio electoral de este PPN es complejo, complicado y dificl de precisar. Cervera tiene poco tirón en los pueblos y en la derecha navarra y representa una tendencia política un tanto «progre». Su equipo está formado por personas poco relevantes y menos conocidas entre la población navarra cuyo único mérito es ser amigos en una «peña sanferminera». A eso hay que sumarle que Cervera no encabezará la lista la Parlamento y que residirá en Madrid. En fin, que veo un horizonte bastante negro para la formación popular.