El nuevo gobierno se propone financiar su popularidad ignorando el problema de las pensiones. ¿Qué problema de las pensiones? El problema de las pensiones es obvio atendiendo a la pirámide de población y la cuestión demográfica, pero salta también a la vista atendiendo la evolución de las principales magnitudes relativas al pago de las pensiones. Cualquiera que vea las cifras y después escuche al gobierno del PyP (Pedro y Pablo) debería saber que le están engañando.
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El siguiente gráfico resulta bastante expresivo. En primer lugar, observamos que el gasto anual en pensiones asciende a más de 150.000 millones (los Presupuestos Generales del Estado son 472.000 millones). En segundo lugar observamos que se trata de una cifra no sólo creciente, sino increíblemente creciente. En 2007, antes de la crisis, en plena cresta de ola, el gasto en pensiones era de “sólo” 91.000 millones. Es decir, habiendo apenas recuperado los niveles de PIB e ingresos de 2007, ahora tenemos que pagar 60.000 millones más que en 2007 para financiar las pensiones. O dicho de otro modo, sólo para mantener el gasto en Sanidad o Educación de 2007 y además pagar las pensiones ahora hay que sacar 60.000 millones más de los bolsillos de la sociedad española.
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A la vista de los números resulta bastante cuestionable no sólo la sostenibilidad del sistema de pensiones, sino también la responsabilidad de los políticos que se dedican a prometer subidas de las pensiones. Claro que sería maravilloso que todo el mundo tuviera pensiones mucho más altas, pero primero intentemos que no reviente la caja para poder pagar siquiera las que tenemos. Por no mencionar que las pensiones salen de los salarios. A pensiones más altas, salarios más bajos. ¿Son conscientes de estos los yayoflautas? ¿Son conscientes los trabajadores que aplauden a los yayoflautas? ¿O aún no nos hemos enterado de que el dinero para pagar las pensiones sale de los impuestos y que los impuestos salen de los salarios? A una sociedad dispuesta a creerse cualquier cosa, los políticos le prometerán cualquier cosa.
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Teniendo en cuenta que el coste de las pensiones ya supera los 150.000 millones anuales, eso significa que, incluso asumiendo un estancamiento en el número de pensionistas (cuando la demografía anticipa todo lo contrario) cada 1% de subida en las pensiones representa 1.500 millones adicionales de gasto. Ahí si que entramos en el auténtico terreno de la diversión con los impuestos porque, ¿saben cuánto espera recaudar el gobierno con la cacareada subida del IRPF de los ricos que ganan más de 130.000 euros al año? Pues según los propios cálculos del gobierno, sólo 328 millones de euros.
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Afortunadamente los cálculos sobre la subida del diésel estiman una recaudación que rondaría los 670 millones de euros. Por si alguien se creía que las subidas de las pensiones que promete la izquierda para financiar su popularidad las pagan los ricos. Por si alguien se creía que las subidas de las pensiones no salen de los salarios.
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